De un tiempo a esta parte, los temas que más de actualidad están son la conciliación entre vida laboral y vida privada, la inmigración, los Estatutos de autonomía, E.ON, Endesa, Gas Natural y, desde hace poco, la nueva reforma laboral y el escándalo de los sellos. Todos estos temas captan la atención de técnicos, directivos y altos mandatarios. Junto con el fútbol, seguramente, sean los temas de los que más se ha hablado en el mundo de la empresa en España en los últimos meses. Esto está muy bien, pero yo no me siento satisfecho. Ustedes se preguntarán, a lo mejor, el motivo por el que no me siento satisfecho; pues es muy simple: que del ámbito de los RRHH, el ámbito al que pertenezco, no se habla casi nada.
Tengo conocimiento de este ámbito, el de los recursos humanos, y me da la sensación de que parece que hay desinterés en comunicar, en informar sobre actuaciones e innovaciones, cuando debía de ser todo lo contrario. Hay desidia.
Las agencias y gabinetes de comunicación y prensa se encargan de bombardear con notas y comunicados las bandejas de entrada de todas las redacciones, pero sin orden ni concierto, cómo diría mi padre, “al tun tun”, sin dar la cara ¿Dónde están los artículos de opinión? ¿Dónde han quedado los editoriales provocadores, los que despiertan interés? ¿Quién ha escondido al escritor que todos llevamos dentro, o casi todos?
Las empresas deberían buscar la notoriedad con escritos de interés, no con comunicados insulsos y faltos de vida. Se debe buscar la notoriedad a través de la imaginación y de la innovación.
Lo que quiero expresar con este espacio es que los Recursos Humanos no se basan en el Marketing, en unas reglas nemotécnicas ni en nada parecido. La comunicación en el ámbito de los Recursos Humanos debe ir más allá del anuncio en prensa, se debe recuperar la pasión por escribir y opinar como antaño. Es cierto que los tiempos cambian, y el mundo de la comunicación también, pero innovar y escribir sobre lo innovado se puede hacer tanto con una maquina de los años 70 como con un portátil último modelo.
Soportes de RRHH hay bastantes, lo que parece que hay menos son esos profesionales imaginativos e innovadores que pueden llenar de conocimientos e ideas a los lectores de aquellos. Y eso es un problema. Bastaría con dejar de quejarse sobre lo poco importante que parece ser la función de RRHH y comenzar a darle al coco de la imaginación para aportar cada uno nuestro granito de arena.
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