El cambio es un hecho: el sector de viajes de negocio y gestión del gasto se encuentra en una continua transformación, reinventándose y haciéndose cada vez más fuerte a la hora de adaptarse ante los nuevos retos, oportunidades y perspectivas de una generación que están marcando un antes y un después en la sociedad actual. Hablamos de las generaciones Z y Alpha. No se trata de ningún tipo de lenguaje o alfabeto, sino de aquellos que se conocen como los consumidores del futuro, los que dominarán el mundo digital y que, además, traerán consigo una serie de nuevas expectativas al mercado laboral.
Son varios los hábitos que han ido cambiando como resultado a las exigencias de las nuevas generaciones, las cuales demandan cada vez más inmediatez, accesibilidad y eficiencia a lo que consumen. Ya no compran una película, o un CD de música: pagan por los minutos escuchados o visionados. Incluso prefieren alquilar un coche por días que tener vehículo propio.
Se trata de ejemplos y tendencias que antes percibíamos como algo inaudito, y que ahora lo introducimos de forma innata en nuestro día a día.
Profesionales cada vez más exigentes
Se prevé que en 2030 la Generación Z sea el grupo demográfico más numeroso, mientras que los integrantes de la Generación Alpha comenzarán su carrera profesional. Dentro de una década, y adentrados ya en el mundo laboral, ambas generaciones determinarán las nuevas tendencias de los viajes y la gestión de gastos, por lo que las organizaciones tendrán que pivotar en base a las necesidades de sus viajeros de negocios, y no al revés.
De acuerdo a un estudio reciente de SAP Concur sobre las predicciones de las nuevas generaciones, existen tres principales cambios que marcarán el escenario de los viajes de negocio, relacionados con las preferencias tecnológicas, los estilos de comunicación y las expectativas de sostenibilidad:
- La tecnología es una necesidad básica: La Generación Z y la Generación Alpha son nativos digitales. Han crecido dentro de un ecosistema que ha dado forma a sus preferencias, tendencias de consumo y expectativas tecnológicas. La velocidad vertiginosa de Internet, los smartphones y las aplicaciones móviles influyen en las preferencias de comunicación de los trabajadores en la actualidad, y determinarán el comportamiento de los del futuro. No es ningún secreto que la actual Generación Z prefiera comunicarse digitalmente antes que físicamente. Por ello, es menester que las empresas deban reinventarse y mantenerse a la vanguardia, dentro de un mundo que evoluciona constantemente, sobre todo para garantizar la retención del talento y, al mismo tiempo, seguir siendo productivas y rentables. Porque la tecnología ha dejado de ser una herramienta para convertirse en una necesidad.
- La importancia de la personalización: A más inmediatez, más personalización. Sin duda, la tecnología ha servido de palanca para modelar las expectativas de la Generación Z. De esta forma, y en un futuro cercano, se prevé que los departamentos de RRHH serán capaces de entender y adaptarse a los comportamientos y tendencias de una generación que espera mucha más personalización por parte de su empleador, alineando de esta forma su trayectoria profesional y las nuevas oportunidades de desarrollo con sus intereses y preferencias.
- La sostenibilidad como protagonista: La sostenibilidad es una de las prioridades para las generaciones más jóvenes, las cuales buscan una mayor integración y coherencia entre los valores de su empresa y los suyos. De hecho, hoy en día, son cada vez más las empresas que se enfrentan a la creciente presión de los millennials y parte de la Generación Z a la hora de impulsar nuevas estrategias de sostenibilidad y que estas se implanten de forma transversal en todos sus departamentos, con el fin de reducir su impacto ambiental.
Por ello, no es raro que las compañías ya hayan instaurado nuevos objetivos, con el fin de establecer acciones que fomenten la sostenibilidad. Y es que la tendencia de “cuidar el planeta y mejorar el negocio” continuará con mayor énfasis a medida que las generaciones más jóvenes se incorporen al mercado laboral.
Sin lugar a dudas, son ellos el futuro de la sociedad, los que revolucionarán las operaciones de viajes de negocio y gestión de gastos. Una tendencia que hace que los líderes empresariales deban reinventarse y establecer, más pronto que tarde, acciones que puedan alinearse con las expectativas de unos profesionales cada vez más exigentes, además de responder, de forma proactiva, a los retos no solo tecnológicos, sino también de comunicación y sostenibilidad, con el objetivo de atraer y retener talento empresarial.