Margarita Salas, María Blasco, Montserrat Calleja, Rosa Menéndez, Alicia Calderón, Gabriela Morreale, son los nombres de tan sólo algunas de las muchas mujeres españolas que están revolucionando la ciencia hoy en día tanto dentro como fuera de nuestras fronteras.
Quizá, es cada vez más común conocer la notoriedad de mujeres en sectores relacionados con la ciencia. Sin embargo, al menos en España, solo el 16 % de los profesionales del área de las STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, por sus siglas en inglés) son mujeres.
De hecho, las últimas cifras reveladas al respecto recogen que tan sólo un 0.7% de las mujeres adolescentes están interesadas en estudiar un grado de estas disciplinas, frente al 7 % de los hombres. Así se refleja en el último informe publicado por el Observatorio Social de la Fundación la Caixa El ámbito de las STEM no atrae el talento femenino, elaborado por las investigadoras Mireia Usart, Sònia Sánchez-Canut y Beatriz Lores, de la Universitat Rovira i Virgili.
Unos porcentajes muy bajos si los comparamos con las carreras de educación infantil o trabajo social y orientación, donde el tanto por ciento puede llegar a superar el 90 y el 80%, respectivamente. Esta diferencia pone en relieve y en duda si estamos siendo o no capaces de atraer el talento de nuestras niñas a las carretas de las áreas de las ciencias, tecnología e ingenierías. La preocupación en este caso no es que la mujer opte por no continuar con sus estudios ya que la presencia del género femenino en las universidades supera el 50%.
Tampoco aplicaría que el hombre sea de ciencias y la mujer de letras. No. Los datos reflejan que las mujeres matriculadas en este tipo de carreras presentan un menor índice de abandono y también presentan un mejor rendimiento medio.
Estas cifras, son un mero reflejo de la brecha que existe en el acceso de las mujeres a las carreras STEM y, por consiguiente, el largo camino que queda por hacer para cumplir con la Agenda 2030, que incluye como objetivo a alcanzar la necesidad de lograr la igualdad de género y de empoderar a las mujeres y niñas.
Por esto, nos vemos en necesidad de romper esta brecha. Lograr un mundo sostenible implica también impulsar la educación inclusiva y basada en la diversidad. Se presenta como necesario dar visibilidad entre las niñas a referentes femeninos en este ámbito, científico y tecnológico, además de olvidar los estereotipos vinculados al género.
Cerrar esta brecha es beneficio de todos, las carreras STEM tienen unas perspectivas de empleo muy elevadas. Se estima que en España hay 10.000 puestos de trabajo en el ámbito de la tecnología que no se pueden cubrir actualmente, por la escasez de perfiles cualificados, según datos del informe realizado en 2022 por DigitalES. El desafío de las vocaciones STEM.
Distintas administraciones –estatales, europeas e internacionales– invierten esfuerzos en atraer a las mujeres a estas carreras. El compromiso de EDP en este ámbito es férreo, muestra de ello es que, recientemente, tanto EDP como EDP Renewables han sido reconocidas, una vez más, por sus buenas prácticas en materia de inclusión e igualdad de oportunidades profesionales entre hombres y mujeres, al haber sido incluidas en el índice Bloomberg de Igualdad de Género 2023, en el que participan 600 empresas a nivel mundial.
En este contexto, EDP tiene como objetivo en su plan de Igualdad de Género 2022-2023 incrementar el número de mujeres en la compañía, con un objetivo global del 30% para 2025. Además de promover una mayor participación femenina en la empresa y en los puestos directivos, el grupo ha fomentado la contratación de más mujeres para puestos técnicos, tanto en cargos intermedios como superiores en todas sus áreas.
Tenemos que concentrar nuestros esfuerzos en cerrar la brecha de género y especialmente en las disciplinas relacionadas con la transición energética. Para ello, es básico que continuemos trabajando para incrementar la visibilidad de las mujeres y poder así, generar referentes entre las niñas para los puestos de responsabilidad que les esperan
Somos conscientes de que tenemos por delante un futuro con innumerables desafíos, pero es importante implementar iniciativas que ayuden a conseguir el objetivo de contribuir a una sociedad inclusiva e igualitaria. La diversidad de genero no es una moda pasajera, se presenta como una necesidad en las organizaciones ya que si no se cuenta con grupos de trabajo interdisciplinares que aporten diferentes puntos de vista y enriquezcan a la empresa será muy difícil avanzar en el camino correcto.
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