Las vacaciones son sinónimo de descanso y por tanto, de desconexión, o así debería ser. La realidad es que 3 de cada 4 españoles no logran desconectar del todo[1] durante sus días fuera de la oficina. Algo que puede resultar contraproducente ya que la mente necesita descansar para poder volver preparada para el inicio del nuevo curso. Cuando llega septiembre solemos hacernos nuevos propósitos y por eso hay muchas cosas en la cabeza que necesito ordenar, por eso siempre es necesario cuidar nuestro tiempo de descanso para arrancar el nuevo curso con las energías totalmente renovadas.
Cuando estamos trabajando nuestra mente está enfocada en las tareas del día a día y, en ocasiones, se olvida o se reduce la creatividad en favor de la ejecución, por eso, no resulta extraño que cuando salimos del ambiente laboral nos vengan a la cabeza nuevas ideas, pensamientos o propósitos. Y lo cierto es que todo esto es necesario ya que sin este descanso no es posible refrescar las ideas y, en definitiva, impulsar la creatividad.
Byung-Chul Han explica en ‘La Sociedad del Cansancio’ cómo nos sometemos a una especie de autoexplotación cuya única salida es aprender a perder el tiempo, a no vivir obsesionados cada minuto con la productividad. Tenemos que reservar tiempo para divertirnos y volver a jugar, porque vivimos siempre con la angustia de no hacer todo lo que podríamos hacer y encima nos culpamos a nosotros mismos de nuestra supuesta incapacidad porque creemos que la superproducción es la única manera para realizarse.
Los profesionales que nos dedicamos al diseño estratégico tenemos que tener muy claros los procesos de trabajo, pues de ahí surgen después las ideas que articulan las estrategias que posteriormente dan forma a los proyectos en los que trabajamos. Pero por desgracia todos, incluso el ejecutivo mejor pagado, trabajamos como esclavos aplazando indefinidamente el ocio. ¿Qué hace falta entonces no solo en el día a día, sino sobre todo en verano, para tener la mente despejada y poder acometer los procesos creativos con eficacia? Durante el periodo de descanso, lo más importante es dejar todo de lado durante un tiempo para descansar la mente y que la creatividad vuelva viva y con más fuerza cuando retomamos la rutina laboral.
Una de las prácticas que llevo varios años poniendo en marcha es el desactivar absolutamente todas las notificaciones, o incluso eliminar apps que no necesito esos días como Slack o Trello y ocultar la app del Mail. Parece una tontería pero a veces tenemos la tentación de hacer pequeñas incursiones para comprobar que no hay ningún fuego, que realmente no aportan nada aparte de impedir que desconectemos realmente.
La estrategia del ‘no-tiempo’ y dedicar momentos para ti
Muchos de los grandes expertos y líderes del mundo actual son referentes en este tema, ya que sus creaciones y grandes proyectos han estado marcados por muchas horas de trabajo, pero también de la desconexión necesaria para que esas ideas tomaran forma y llegaran a buen puerto.
Lo que han realizado muchos de ellos se conoce como el ‘no-tiempo’, que básicamente se trata de un momento dedicado a uno mismo a poner pausa y desconectar, a establecer un parón en nuestro día a día y en nuestras tareas cotidianas para, en definitiva, no hacer nada. Esto es necesario para potenciar una creatividad que, sin el descanso necesario, lo que hacemos es perjudicarla y no dejar que las ideas tomen forma y las pongamos al servicio del diseño y de los proyectos que tenemos por delante.
Si nos basamos más concretamente en la idea de dedicar tiempo solo para nosotros, Joseph Campbell en su obra ‘El poder del Mito’ apunta a una idea interesante en este sentido: ‘La Estación de la Felicidad’. Este concepto básicamente indica que debes tener un momento o un lugar durante el día donde desconectes absolutamente de todo: del móvil, de tus contactos, de las noticias y de las notificaciones del correo electrónico. En este periodo debes concentrarte en ti, en lo que quieres ser o a lo que quieres aspirar.
Esto no funciona con hacerlo de manera puntual. Para que cobre sentido en la vida del creativo, se debe establecer una rutina para ello. No hace falta tener un lugar concreto para ello, sino tener un momento en el que encontrar la ‘Estación de la Felicidad’ y llevarla a cabo para poder tener este momento de intimidad. Eso sí, debemos preocuparnos de tenerlo por un lado, y por otro de no agobiarnos con ello al principio. Hay que darle tiempo ya que poco a poco este momento para nosotros acaba dando resultado para aportarnos las ideas y conceptos que necesitamos para aplicarlos en nuestro trabajo.
Muchas veces es habitual interesarse por los hábitos de descanso y desconexión de los grandes líderes mundiales, tanto políticos como de las grandes empresas globales. En este sentido, Oprah Winfrey siempre busca un momento para hacer meditación antes de trabajar. Jeff Bezos tiene muy claras sus prioridades y pide no tener reuniones antes de las 10:00 ni después de las 17:00 horas. El motivo es estar centrado en su familia y estar centrado en lo que es importante para él. Por su parte, Bill Gates opta por hacer deporte todas las mañanas antes de iniciar su jornada laboral como herramienta para desconectar.
Para quienes nos dedicamos al diseño y a la innovación, tener todas estas cuestiones en mente es fundamental para tener siempre la creatividad fresca en todas y cada una de las fases del proceso de diseño. Desde la búsqueda de respuestas, pasando por la generación de ideas y el prototipado de soluciones y su implementación, para todo ello es necesario un descanso para poder tener las ideas claras, acometerlas y llevarlas a cabo lo mejor posible.
En la metodología del diseño estratégico nos enfocamos en solucionar problemas dando sentido a productos digitales y experiencias para que impacten en la vida de sus usuarios y, en definitiva, sean rentables. En este sentido, para descubrir las ideas y explorar los diferentes conceptos que necesitará cada proyecto, necesitamos desconectar para luego reconectar empatizando con los usuarios para detectar necesidades y nuevas oportunidades sin la prisa de la respuesta inmediata, sino explorando caminos desconocidos y desafiando el status quo, para comprender cómo con imaginación e investigación las hipótesis pueden materializarse para aportar todo nuestro valor.
[1] “Estudio de TopDoctors verano y bienestar físico y mental 2022”
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