Gestión de equipos en remoto: beneficios y responsabilidad a partes iguales para los empresarios

Mucho se ha hablado en estos dos últimos años del trabajo a distancia, una modalidad que, si bien no es nueva, sí ha cobrado especial protagonismo con la llegada de la pandemia. Si echamos la vista atrás, el número de empleados que trabajaba de forma remota en el primer trimestre del 2020 era muy bajo. En España, por ejemplo, solo un 10,9% de la población activa realizaba su labor profesional desde casa, menos de la mitad que en otros países europeos como Finlandia o Países Bajos.

Pero, en pocos meses el teletrabajo dejó de ser una rareza para convertirse en algo habitual. A mediados del 2021 el 17,6% de las personas ocupadas en España (con edades comprendidas entre los 16 y 74) habían realizado su labor profesional desde casa, según datos del Instituto Nacional de Estadística. Su experiencia con el teletrabajo fue valorada de forma muy positiva por la mayoría, especialmente por tres motivos: no tener que realizar desplazamientos a la oficina, la posibilidad de gestionar su tiempo y tener la oportunidad de poder conciliar la vida profesional con la familiar.

Sus beneficios están claros para los trabajadores, pero ¿y para las empresas? Al desaparecer las fronteras de la oficina, el empresario tiene a su disposición una fuerza laboral formada por autónomos o asalariados con opción a disponer de su tiempo, de la forma que mejor les convenga, para responder a las necesidades de la compañía. Una ventaja que también trae consigo una gran responsabilidad: la gestión eficaz de los equipos en remoto.

¿Qué significa para los empresarios tener a su disposición equipos de trabajo en remoto?

En España, el 56% de las empresas han optado por implantar un modelo híbrido donde la prestación presencial se combina con el teletrabajo. Disponer de equipos en remoto trae consigo una serie de ventajas que las empresas nacionales deberían empezar a valorar, dejando a un lado la cultura arcaica del presencialismo. Pero, ¿cuáles son esas ventajas?

• Acceso a una mayor reserva de talento. El trabajo a distancia permite globalizar la adquisición de talento.
• Facilidad para ampliar el equipo. La contratación a distancia es más rápida, sobre todo si se seleccionan trabajadores autónomos, en lugar de trabajadores a tiempo completo.
• Mayor eficiencia. Los trabajadores a distancia declaran una productividad personal hasta un 40% mayor que cuando trabajan desde una oficina.

Pero los beneficios del trabajo en remoto son el resultado directo de una gestión eficaz de estos equipos. El primer paso es crear para ellos un entorno adecuado. Para ello es recomendable seguir alguna de estas estrategias:

1. La primera, y fundamental, es ser consciente de las tareas que pueden ser realizadas de forma remota, y que básicamente son aquellas que tienen un componente digital. Cualquier persona con un ordenador y acceso a la red tiene la capacidad de realizar cualquier operación financiera, informática o de venta fuera de una oficina. Por ello, el empresario deberá centrar sus esfuerzos de gestión telemática.
2. El trabajo a distancia también tiene unas reglas que deben quedar bien claras para todos los miembros del equipo. Establecer unos canales adecuados de comunicación y diseñar políticas que permitan mantener a todos los trabajadores alineados con la misión de la empresa son la base de una buena gestión.
3. Enseñar a tu equipo a comunicarse de forma asíncrona, es decir, a expresar de forma coherente sus pensamientos por escrito. El motivo no es otro que eliminar las distracciones de los correos, mensajes, reuniones en remoto…
4. Promover el intercambio de conocimientos. La cultura de comunicación escrita también ayuda a distribuir eficazmente los conocimientos entre personas que no comparten el mismo espacio físico.
5. Crear oportunidades para que los integrantes de un equipo en remoto establezcan conexiones personales entre ellos. Ya sea a través de reuniones online o mediante sesiones de trabajo conjuntas en paralelo, las actividades en común mantienen la cohesión del equipo.

El principal objetivo del director de un equipo remoto es la preparación de sus empleados para el éxito. Y para ello hay que explicar lo que significa el éxito para su empresa. Una buena estrategia de comunicación que permita el intercambio de conocimientos también es fundamental. No se trata de hacer más reuniones sino de cultivar un entorno en el que todos puedan trabajar de forma asíncrona (cuando lo necesiten). Ese es el secreto de una gestión eficaz de equipos remotos.