No seamos «dodos»

Como cada año, comenzamos el mes de enero llenos de nuevas ilusiones, esperanzas y con los mejores deseos para que todos nuestros proyectos se puedan cumplir.

Este 2021, a diferencia de años anteriores, lo iniciamos con mucha incertidumbre sobre el futuro que nos viene por delante, sobre el que unos dicen que estamos al final del túnel y otros creen que aún llevará mucho tiempo salir del mismo. En cualquier caso, ansiedades y miedos estarán presentes durante los próximos meses.

Estemos donde estemos, a la hora de pensar cómo afrontar este incierto 2021 me viene a la memoria la historia del dodo, un especie extinta de ave, autóctona de la Isla Mauricio (hoy República de Mauricio). Este ave, relacionada con las palomas que habían dejado de volar para volverse terrestres, medía aproximadamente un metro de altura, tenía un plumaje grisáceo, pico en forma de garfio de unos 23 cm. y unas alas muy pequeñas que, junto con su gran peso (entre 13kg y 23 kg), le hacían incapaz de volar. Estas características la convirtieron en un ave indefensa ante el ser humano.

En cuanto a su nombre existen diversas teorías relativas a la palabra en sí mismo: unos dicen que proviene del holandés (“holgazán”, “ave repugnante”,…), otros del portugués (“estúpido”, «tonto»), pero lo que si hay consenso es cuanto a su sentido peyorativo.

Cuando los primeros marineros europeos llegaron a la Isla Mauricio en el siglo XVI se encontraron con un ave torpe y fácil de cazar que no veía al ser humano como una amenaza. Su caza indiscriminada y la destrucción de los árboles de los que se alimentaba, entre otras razones, provocaron su completa extinción apenas décadas después de ser descubierto.

¿Qué relación puede tener el dodo con la época actual que vivimos? Pues personalmente pienso que lo que le pasó al dodo puede ocurrirle también a nuestras empresas. Tengo la sensación de que estos últimos años nuestras empresas han vivido en cierta medida como lo hacía el dodo, “acomodadas”, alcanzando resultados óptimos, con unos riesgos más o menos predecibles, sin miedos y, por tanto, cayendo en el exceso de confianza sin percibir grandes amenazas…hasta que una crisis sanitaria a nivel mundial nos ha desbordado. Si como le ocurrió al dodo nos quedamos quietos esperando a ver qué sucederá, si no vemos los riesgos que supondrá el no anticiparnos a esos cambios tan radicales que ya se están produciendo, si seguimos esperando a que nuestro entorno vuelva a la situación anterior, en definitiva, si no desarrollamos una inteligencia suficiente como para sobrevivir ante el cambio de hábitat, entonces nuestro destino será el mismo que el del dodo, nuestra completa desaparición. 

Desde el equipo de RRHHDigital queremos afrontar este año, en el que además celebramos nuestro 15° aniversario, con orgullo y responsabilidad por nuestro papel de periódico de los recursos humanos y, atentos a estos cambios tan profundos, desarrollaremos nuestra labor diaria de comunicación, adaptándonos a la nueva forma de consumir información. Webinars y podcast estarán de forma permanente en nuestra oferta de contenidos, volveremos a celebrar «Los + Influyentes de RRHH» y en cuanto a los eventos sectoriales los desarrollaremos con los nuevos formatos híbridos que tan bien han sido recibidos por la audiencia, además, por supuesto de continuar creando nuevos foros de encuentro donde poner en común las nuevas prácticas que se consolidarán en la gestión de los RRHH.

Para finalizar quiero animaros a todos a dejar atrás la tristeza y los miedos que nos ha causado el difícil y amargo 2020, trabajemos con optimismo y valentía para adaptarnos a estos nuevos tiempos y, si queremos aprender de experiencias pasadas para ser mejores, ¡¡no seamos dodos!! 

¡Feliz 2021!