La comunicación como clave para empoderar a la mujer

Conscientes de la necesidad de transmitir el valor del emprendimiento  a las mujeres, la ONU estableció desde el año 2014 el 19 de noviembre como el Día Internacional de la Mujer Emprendedora. La iniciativa tiene como finalidad poner de manifiesto la necesidad de visibilizar a las emprendedoras de todo el planeta.

Aunque la brecha de género se está reduciendo, según el informe GEM España sobre emprendimiento, lo cierto es que todavía queda mucho camino por recorrer.

Por esta razón, considero que visibilizar el papel de la mujer a través de la comunicación es fundamental. Y poco a poco, son más las mujeres referentes en su área que están perdiendo el miedo a mostrar quiénes son  y el valor que aportan,  inspirando a otras mujeres a conseguir confianza. Este reconocimiento al papel de la mujer en el emprendimiento está ayudando a muchas mujeres en el empoderamiento y crecimiento personal y profesional.

Hoy en día tenemos muchas vías y plataformas a través de las cuales podemos mostrar al mundo cuál es nuestro valor. La comunicación se está convirtiendo en la herramienta más efectiva para muchas mujeres que han optado por mostrar  al mundo el valor que son capaces de generar en la sociedad.  

En esta línea, los ecosistemas de emprendimiento donde las mujeres comparten experiencia con otras emprendedoras, están ayudando a que pierdan el miedo a liderar nuevas empresas. Rompiendo creencias limitantes e impulsando el liderazgo femenino.

El Observatorio Estatal de la igualdad en el Emprendimiento muestra como las iniciativas empresariales de las mujeres se basan en el sector servicios. De hecho, el 85% de las emprendedoras se concentran en este sector, frente al 65% de los hombres emprendedores.
Y el informe destaca que las estrategias empresariales de las mujeres son aperturistas en cuanto a la innovación.

Este este sentido, además de la innovación, trabajar la visibilidad y comunicación de estos servicios liderados por mujeres será fundamental en el futuro. También la educación empresarial que se debería de comenzar en centros educativos a edades tempranas, para que niños y niñas interioricen y aprendan las competencias y habilidades de emprender.

De esta forma, se entenderá la importancia de visibilizar el emprendimiento para el desarrollo de empresas y construcción de referentes. Y para derribar así las barreras de género que dificultan arriesgarse a exponerse.

Después de 18 años trabajando para la Administración Pública, he tomado la decisión de emprender en femenino. De comunicar mi experiencia, mis competencias y habilidades al mundo para ayudar a otras personas o entidades a que comuniquen también su valor. Por eso, hoy es un día especial, en el que aprovecho para animar a otras mujeres a creer en su brillo, valía y a ser conscientes del poder que tenemos para cambiar las cosas.

En mi caso, el emprendimiento en femenino ha sido la piedra angular de este camino. Mi misión es ayudar también a través de estrategias, canales y medios de comunicación a otras mujeres para que muestren al mundo su propuesta de valor, utilizando todas las herramientas y estrategias comunicativas a su alcance.
Sin duda, una decisión y aventura la de emprender en femenino, no exenta de dificultades, de incertidumbre, pero con mucha ilusión y pasión por poder cumplir mi misión.

Hoy es un día para reivindicar que se integre la perspectiva de género en medios de comunicación y eventos públicos, dando voz también a mujeres expertas y referentes en su ámbito profesional.

La voz de las mujeres a través de diferentes plataformas de comunicación como fórmula para dar visibilidad a su profesionalidad, en algunas áreas que anteriormente eran lideradas por hombres.

Para conseguir este reto es importante contar con apoyos sociales e institucionales. Pero también trabajar la visibilidad, comunicar y compartir el valor que somos capaces de generar, para inspirar, ayudar y reforzar a otras mujeres.

Estoy convencida de que aunque todavía queda mucho por hacer, poco a poco avanzamos. Y este es mi pequeño homenaje a todas las mujeres que día a día trabajamos por ser mejores personas y profesionales y todavía seguimos soñando con romper techos de cristal.