Con esta línea de pensamiento, el famoso italiano Nicolau Maquiavel (1469-1527) se convirtió en una de las figuras más brillantes del Renacimiento europeo, reflejada en su obra maestra consagrada sobre malicia política, titulada El Príncipe, publicada póstumamente en 1932.
«Fue filósofo, historiador, poeta, diplomático y músico de origen florentino. Es reconocido como el fundador de la ciencia política moderna y el pensamiento, por haber escrito sobre el estado y el gobierno como realmente son, y no como deberían ser».
Con este «gancho», y con las observaciones recogidas a lo largo de nuestro «paseo» como consultor en Gestión de Calidad, hemos encontrado que hay empresas que enfatizan más en metodologías orientadas a la resolución de problemas, que en la Gestión de Prevención Total… fabricación de productos y la prestación de servicios.
Nuestro hogar, medicina, aviación, el mundo del deporte, el segmento de servicios, entre otros, son referencias para el establecimiento del nivel Cero de Fallas, porque la reelaboración es inherente a los productos.
Incluso las empresas estructuradas para reaccionar rápidamente a sucesos negativos en el mercado, no pueden evitar daños irreparables.
Un análisis crítico de las causas de los incendios en los Edificios Joelma (1 de febrero de 1974) con 187 muertes y más de 300 heridos y el Edificio Andraus (24 de febrero de 1972) con 16 muertes y 330 heridos, ambos en Sao Paulo, definitivamente pueden convencernos – que la prevención es mejor que remedio.
Los productos y servicios fuera de especificación siguen ocurriendo a diario, causando sufrimiento a las personas que pierden a sus seres queridos más allá de los daños sociales, económicos, financieros y culturales.
Como causas de estas ocurrencias no deseadas, destacamos la falta de una cultura de prevención, la falta de conocimiento que demuestra la relación costo/beneficio, la mala praxis, la imprudencia, la irresponsabilidad, los procesos operativos improvisados, la falta de mantenimiento preventivo, la falta de proyectos de reciclaje de conocimientos para los empleados y muchos otros que, sumados a ellos, pueden agruparse en dos bloques: actos inseguros y condiciones inseguras.
Para una conclusión objetiva, es de importancia fundamental extender el análisis al campo emocional que puede revelar una presión excesiva en el lugar de trabajo, el estado de salud sacudido, la falta de respeto, el miedo a la pérdida de empleo, la violencia urbana, el endeudamiento financiero y la desigualdad social.
En el caso de la prevención, es necesario involucrar, sensibilizar y comprometer a todos los gerentes y empleados de las organizaciones.
Si es imposible ser perfecto, es perfectamente factible ser menos imperfecto.
La prevención, bajo ninguna circunstancia, no debe ser un objetivo… debe ser un hábito.
Para nuestra reflexión…»cuando el mundo pensó que tenía todas las respuestas… llega al mercado y cambia todas las preguntas».
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