Puesto que el COVID-19 sigue provocando una disrupción generalizada, algunos países han pedido a los funcionarios y trabajadores de empresas privadas que trabajen desde casa. Empresas privadas de todo tipo han seguido su ejemplo y han empezado a adoptar prácticas laborales más flexibles y la opción del trabajo remoto para contrarrestar las disrupciones provocadas por problemas graves de tráfico o por condiciones climatológicas adversas.
La nube es un facilitador fundamental y un factor de éxito en el trabajo a distancia, dado que permite que los empleados colaboren, compartan y tengan acceso a cualquier archivo o documento desde cualquier lugar y en cualquier momento. Gartner indica que en 2022, hasta un 60 % de las empresas utilizarán la oferta de un servicio gestionado por cloud de un proveedor externo.
Veeam considera que hay tres áreas clave que garantizarán que una empresa pueda operar de forma segura gracias al trabajo a distancia sin que se produzcan interrupciones que afecten a los datos y servicios fundamentales para la misión del negocio:
1. El crecimiento de la gestión de datos en cloud (CDM)
Resulta crucial disponer de fácil acceso a los datos en un escenario de teletrabajo y la gestión en cloud lo permite. La protección de los datos también es importante, sobre todo ahora que hemos visto múltiples casos de filtraciones de datos en los últimos años.
Más allá de lo que suceda en 2020, nos interesa el aumento de la movilidad y portabilidad gracias a la gestión de datos en cloud, al tiempo que desplegamos medidas adicionales de seguridad, puesto que las empresas quieren incrementar la accesibilidad de los datos dentro de su lugar de trabajo. La relevancia de CDM no va a hacer más que aumentar durante el próximo año precisamente porque para las empresas es cada vez más vital contar con datos seguros, disponibles y de fácil acceso.
2. El backup continuo puede impulsar la trasformación
Las empresas deben ser conscientes de cómo gestionan los datos en cloud y aprovechar al máximo las mejores herramientas que les permitan hacer backup de los mismos. De acuerdo con el Informe2019 de gestión de datos en cloud elaborado por Veeam, prácticamente un tercio de las empresas ahora hacen backup y replicación de forma continua de las aplicaciones de alta prioridad. Esta cifra aumentará a medida que más empresas se den cuenta de la importancia que tiene una recuperación sencilla de los datos fundamentales para el negocio.
Durante esta década también vamos a ver un incremento en el número de herramientas para que las empresas hagan backup continuo de sus datos en múltiples plataformas y para que puedan llevar a cabo tareas de recuperación completa en cuestión de minutos. Las mismas herramientas también pueden ofrecer a las empresas datos que permitan tomar decisiones informadas sobre la trasformación digital y las estrategias de aceleración del negocio mediante investigación, desarrollo y la realización de pruebas.
3. La adopción de una automatización diferente
A medida que el mundo siga pidiendo más eficacia en el trabajo, veremos una mayor automatización en las áreas de tareas y procesos en las empresas, lo que apoyará la replicación del trabajo humano. Un ejemplo importante de la automatización es la infraestructura como código (IAC). La automatización de la infraestructura, como es el caso de IaC, permite a las empresas configurar y establecer una infraestructura completa utilizando un script al tiempo que elimina los componentes manuales.
Si bien la automatización no es algo inherentemente nuevo, veremos que aquellos que la adoptaron en su día van a optar por combinaciones de diferentes tipos de automatización, entre las que se incluye IaC. De esta manera, las empresas se pueden centrar en proyectos más importantes.
No podemos predecir las crisis globales, los desastres naturales o las emergencias que afectarán a todo el planeta. Sin embargo, contar con la tecnología adecuada puede ayudar.
La respuesta de las empresas al COVID-19 es un ejemplo perfecto del modo en el que se puede mantener la continuidad de las operaciones gracias a las innovaciones tecnológicas. Además, al permitir que los empleados trabajen a distancia, también se minimizan los riesgos para la salud y se les libera de las restricciones que plantea la ubicación y el horario.
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