Los empleados pueden convertirse en ocasiones en los mejores embajadores de tu empresa, y ha llegado el momento de que haya más marcas que empiecen a aprovecharlo. Si se aprovecha el poder de la conexión humana dentro de una empresa, estas pueden ampliar su alcance, maximizar su potencial y aumentar los niveles de satisfacción de sus empleados. Si se crea un ambiente de trabajo en el que los trabajadores se sientan contentos y valorados, entonces las empresas podrán contar con ellos para que sean sus mayores fans. Pero, ¿por dónde debe empezar una empresa?
Transformación digital, empleados digitales
La transformación digital se basa tanto en las personas como en la tecnología. Los líderes empresariales deben centrarse en transformar a la empresa en un negocio que use los datos y la tecnología para desarrollar continuamente todos los aspectos del modelo de negocio, incluidas las comunicaciones internas y las estrategias de marketing externas. Cuando lo hacen, las empresas son capaces de modernizarse y adaptarse a mercados que suelen experimentar un flujo constante.
También es labor de los líderes de una empresa estimular a sus empleados para que se conviertan en participantes activos de cada una de las actividades de transformación digital. Mediante la involucración de los empleados en la evolución continua del negocio, junto con una visión, misión, creencias y valores de la empresa compartidos abiertamente, se ofrece a los empleados la oportunidad de tener un interés personal en la empresa para la que trabajan.
Sin embargo, las empresas deben garantizar no sólo que cuentan con la cultura adecuada, sino también con soluciones pertinentes para poder aprovechar la inversión emocional que realizan los empleados. Las empresas maduras a nivel digital que se centran en las redes sociales como pilar fundamental de sus actividades de transformación digital (lo que llamamos ser «socialmente maduras») se encuentran, por tanto, en una situación ideal para recoger los frutos de los embajadores internos. Los empleados que viven y se sienten parte de la empresa para la que trabajan son los que acaban formando parte de esta red de embajadores, y suelen ser los que ondean la bandera de la marca de puertas para fuera.
Eso es exactamente lo que necesitan las empresas para tener eco y conectar con los clientes, en lugar de enfangarse en campañas de autobombo de escasa repercusión, algo bastante frecuente en las empresas inmaduras en las redes sociales.
Cómo implementar una cultura Social First
La acción de implementar una cultura Social First debería ser una prioridad para cualquier líder empresarial. Es fácil de entender: si una empresa es un buen lugar en el que trabajar, los empleados querrán compartirlo. Los trabajadores activos y participativos en redes sociales son los mejores aliados de una empresa, ya que transmiten valores y generan una reputación como marca que piensa antes que nada en los empleados. De ello se hizo eco el barómetro Edelman’s Trust Barometer, de la consultora de comunicación Edelman, según el cual, el contenido compartido por empleados de todos los niveles de una empresa logra una interacción ocho veces superior a la del contenido corporativo y se vuelve a compartir 25 veces más. Las redes sociales permiten a los usuarios conectarse con todo el mundo en cuestión de segundos. Un único post puede llegar a miles de personas en muy poco tiempo.
El desarrollo, la retención de clientes y la atracción de talento también pueden potenciarse a través de un uso adecuado de las redes sociales. Destacar las creencias y valores de la empresa, su misión y aspectos culturales, constituyen formas de crear redes, conectar con posibles nuevos clientes y socios, y atraer a posibles empleados. Las redes sociales actúan además como algo más que un canal. Se trata de una plataforma que conecta a los distintos departamentos de una empresa, por lo que se convierten a su vez en un vector clave de la transformación digital. También desde la perspectiva de la comunicación interna, si se circunscriben adecuadamente, las redes sociales pueden convertirse en un entorno seguro para que la marca comparta mensajes corporativos con todos sus empleados, desde ejecutivos a aquellos empleados que trabajan de cara al cliente. Y pueden usarse también en RR. HH. para retener y atraer talento, además de gestionar la imagen de marca de los empleados. En cuanto al marketing, las redes sociales permiten a las empresas aprovechar a sus empleados, animándoles de forma activa a contribuir al contenido de marketing de la empresa y extender el alcance de sus campañas.
Liderar con el ejemplo
Una empresa que ha experimentado un gran éxito renovando su estrategia en redes sociales es Meliá Hotels International. Meliá es una de las principales cadenas hoteleras del mundo, con más de 380 hoteles en 43 países. Con una red tan amplia de empleados, la empresa reconoció el valioso activo en que podrían convertirse a la hora de incorporar las redes sociales como un elemento fundamental de su estrategia de transformación digital. Meliá tenía un objetivo claro: convertirse en la cadena hotelera con mayor influencia en las redes sociales y estaban seguros de que serían sus empleados los que les ayudarían a conseguirlo.
El reconocimiento de sus empleados en este sentido distinguió de inmediato a Meliá de la competencia. La cadena hotelera se propuso crear un programa que convirtiera a sus empleados en sus mejores embajadores a la hora de poner de relieve la reputación de la marca como una empresa que pone a las personas primero. El grupo lanzó una iniciativa de Employee Advocacy y un programa de embajadores, que junto con la solución Amplify de Hootsuite, logró más de 142 millones de impresiones en redes sociales en 2018, correspondientes a más de 61000 posts compartidos por los embajadores de la empresa. Esto derivó en un aumento significativo en el número de solicitudes de empleo recibidas por vacante, ya que la percepción de la cadena cambió de excelente a líder.
Humanizar a las marcas para que los consumidores se identifiquen con ellas
«Los empleados hacen que las empresas sean más humanas, ya que permiten a los consumidores ponerles cara a la marca y sentirse más identificados con ella. Los consumidores confían en su familia y amigos en las redes sociales, entonces, ¿por qué las marcas no se aprovechan más de ello y animan a los empleados a promocionarlas en las redes sociales? Si las empresas introducen una cultura en la que las redes sociales sean primordiales y la sustentan en una tecnología de gestión de redes sociales apropiada dentro de una estrategia de transformación digital, verán enseguida los beneficios de contar con empleados comprometidos y apasionados. Y puedes estar seguro de que las empresas que no lo hagan, quedarán rezagadas. La presencia en redes sociales es el futuro de las empresas y ha llegado el momento de aprovecharlo.
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