¿Cómo puede el departamento de Recursos Humanos ayudar a mejorar la productividad de nuestra empresa?, ¿cómo sabes cuándo es necesario reforzar un equipo?, ¿qué hace que las personas se sientan atraídas por su puesto de trabajo?
Estas y otras similares son preguntas que están (o deberían estar) encima de la mesa de los Business Partner de Recursos Humanos.
El negocio necesita que seamos capaces de cuestionarnos nuestros procesos internos regularmente, no sólo cuando las cosas van mal. Habitualmente, las multinacionales nos llenamos de pasos innecesarios que en algún momento alguien diseñó con un objetivo concreto, pero que ahora nadie recuerda y seguimos haciéndolo de forma automática. Esto genera frustración en los equipos y poco enganche con sus puestos de trabajo.
Ante este escenario, la función de Recursos Humanos tiene que ser el catalizador del cambio, pero es el negocio el responsable de mejorar sus propios procesos. Los cambios que se deciden en la estructura base consiguen el compromiso de toda la organización y tienen en cuenta los detalles del día a día.
Lo primero que tenemos que identificar son los procesos y subprocesos de cada tarea y marcar el responsable de realizarlos.
En segundo lugar, debemos preguntar a estas personas si la tarea aporta o no valor añadido a los clientes y si es crítica o no para el negocio. Un archivo de seguimiento que no nos miramos o que, a pesar de revisarlo, no nos mejora el resultado, es un archivo innecesario.
Los grupos de trabajo focalizados en esta mejora deben tener representación de todos los departamentos de forma equitativa y con el mismo poder de decisión. El papel de moderador está en manos de Recursos Humanos, así como el de ser capaz de medir las cargas de trabajo, la productividad y el dimensionamiento de los departamentos.
No queramos cambiarlo todo a la vez, cualquier modificación necesita un testeo y seguramente sufrirá pequeños ajustes.
Como en cualquier cambio, la comunicación es clave para el éxito y nos ayudará a conseguir el engagement de nuestros colegas. El entender qué motiva los cambios y cuál es la finalidad que perseguimos nos hace ser una organización más transparente.
Nuestro deseo es trabajar con equipos maduros, comprometidos y que sean capaces de ver más allá de su propio trabajo para buscar un bien común.
Sin duda el hilo conductor de la filosofía de mejora continua debe nacer del departamento de Recursos Humanos y conquistar a toda la compañía.
Los comentarios están cerrados.