Con un país 100% futbolero y el mundial de Rusia 2018 a la vuelta de la esquina, las empresas deberán buscar el mayor provecho del torneo, para que en lugar de que los partidos de fútbol sean un distractor, se conviertan en un beneficio para los empleados y logren impactar en la satisfacción de los colaboradores.
Si las organizaciones están convencidas de poner en práctica algunas actividades relacionadas con la justa mundialista, deberán de tener un plan que incluya el presupuesto específico, materiales, diseño, campaña, comunicación interna, logística, un equipo responsable para acondicionar los espacios donde se proyectarán los partidos y donde uno de sus objetivos principales tendría que ser la integración.
Las compañías deberán aprovechar esta estrategia para impactar en el salario emocional que está compuesto de todos aquellos elementos de la compensación que no son tangibles, por ejemplo: reconocimientos, flexibilidad de horarios, clases de yoga, gimnasio, o en este caso poder ver el juego de México vs Suecia en la oficina el 27 de junio a las 9:00 am (hora CDMX) donde la selección podría estar jugando su pase a octavos de final.
Con el salario emocional, el empleado no percibe dinero por este beneficio, sin embargo, sí recibe la oportunidad de participar en actividades agradables, entretenidas y que le pueden ayudar a su desarrollo personal. Si la estrategia se logra llevar a cabo de manera efectiva, el personal se sentirá más satisfecho y agradecido con sus jefes y como resultado natural, estarán más comprometidos y serán más productivos.
Las empresas que tienen personal más comprometido son 78% más productivas y 40% más rentables dentro de los índices de rentabilidad de acuerdo con el Informe Global sobre Tendencias en el nivel de Compromiso de Empleados 2018 emitido por Aon, líder mundial en servicios profesionales de riesgo, retiro y salud. Muchos colaboradores permanecen en las empresas no sólo por su sueldo, sino por las condiciones de satisfacción, reconocimiento, oportunidades y flexibilidad que pueden tener en la organización.
Del mismo modo, los empleados deben de entender que tienen un compromiso y responsabilidad con su empresa y cada uno debe estar realizando sus actividades en tiempo y forma, incluso, si su oficina llega a proyectar todos los partidos del mundial, no significa que inviten a todos los trabajadores a que suspendan sus actividades por completo, sino que las pantallas estarán encendidas para que puedan ver el marcador, escuchar la narración (si están cerca) o incluso poder ver la repetición de un gol.
Por otro lado, puede ser que el mundial de Rusia 2018, no sea recomendado para verlo en vivo para todas las empresas, como las de manufactura, donde no sería lo adecuado poner pantallas donde se encuentre la línea de producción y que pueda ser un tipo de distractor y así evitar algún riesgo o retraso. Sin embargo, se pudieran tener actividades fuera de turno, en algún lugar lejano a la línea de producción acondicionado para ver los resúmenes o la retransmisión del partido fuera del horario laboral.
En Aon, tendremos una campaña interna llamada, #AonConMéxico, donde estaremos realizando diferentes actividades para nuestros colaboradores incluyendo: torneo de futbolito, quinielas, concursos y la invitación para convivir y ver el juego de México vs Suecia en nuestras oficinas.
En conclusión, el segmento adecuado para poder ver algunos juegos en vivo del mundial de Rusia 2018, sería para el personal que labora en oficinas. Al finalizar las actividades, el área responsable deberá de hacer una evaluación para medir el impacto en sus colaboradores y determinar si hubo una percepción de mayor integración, si el objetivo se cumplió, si funcionó la actividad y poder obtener los resultados para mejorar en futuros eventos y determinar si es viable replicarlo o no.
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