La revolución digital va a exigir a las empresas, transformar su visión tradicional en todo lo que respecta a la gestión de su capital humano, por una nueva visión a largo plazo, que les permita optimizar y administrar su talento, de una manera más eficiente y operativa.
Tradicionalmente los equipos de RRHH de las empresas están formados por psicólogos, profesionales de las relaciones laborales, sociólogos,… y un gran abanico de profesionales ligados a la gestión de personas. En contrapartida, los departamentos IT o informáticos de las empresas, están pilotados por ingenieros de distinta tipología, muy acostumbrados al desarrollo tecnológico, pero poco familiarizados con la gestión de los equipos.
Ante esta realidad y la creciente necesidad por “tecnificar” la administración de personal y los Recursos Humanos, quiero poner de manifiesto la necesidad que tienen las empresas de promover perfiles mixtos en sus organizaciones, a través de una redefinición de competencias que hoy desarrolla el profesional de los RRHH y el experto en tecnología.
La transformación tecnológica debe llegar a los equipos de RRHH, para facilitar a dicha área la mejor toma de decisiones y la gestión de sus plantillas. Se trata de evolucionar desde los famosos Excel hacia la incorporación de nuevas herramientas como un ERP de RRHH, portal del empleado, firma digital, Business Intelligence,… y otro sin fin de aplicaciones que han surgido en los últimos años, y que son imprescindibles para garantizar la supervivencia y excelencia de las empresas en el tiempo.
Hablo de complementar la formación y preparación de los profesionales de los recursos humanos, para que aporten un valor añadido y necesario a nuestras organizaciones a través de los diversos indicadores estratégicos, que permitirán que la Dirección pueda tomar las decisiones adecuadas.
Es cierto que generaciones como los millennial, están ya familiarizados con el desarrollo tecnológico por mucho que su formación académica venga de sectores más cercanos al mundo de las letras. Pero lo cierto es que por lo general, existe un gap, una barrera, en muchos de los profesionales que dirigen actualmente los departamentos de RRHH de las empresas, entre el mundo que ellos conocen, la gestión de personal, y la tecnología.
No cabe duda que las nuevas tecnologías están transformando la concepción de los Recursos Humanos así como la forma en la que los empleados trabajan, interactúan y se comunican en sus lugares de trabajo. Aunque no conocemos cuál será el futuro, sí que podemos vislumbrar que lo digital adquirirá un papel aún más importante que el actual en todos y cada uno de los procesos que intervienen en la gestión del capital humano. Por ello, las empresas deben comenzar sin dilación su transformación hacia lo digital, y eso incumbe en primer lugar a sus profesionales de recursos humanos.
Si queremos aportar valor a nuestras empresas, no podemos ser “ciegos” ante la realidad que nos rodea y que ha posibilitado ya a otros muchos sectores adaptarse obteniendo ventajas competitivas. El reto ahora, está en manos de los que dirigimos equipos de trabajo. ¿Queremos asumirlo?
Los comentarios están cerrados.