Los planes de formación siempre han sido la piedra angular para el desarrollo y la modernización de las empresas. Un estudio detallado de estos programas nos permitiría ver qué retos ha afrontado el sector empresarial en las últimas décadas. Desde que dimos nuestros primeros pasos ahora hace tres años, en Homuork hemos colaborado con los departamentos de Recursos Humanos de grandes multinacionales acompañándolas en el diseño de sus planes formativos. Un tiempo que nos ha servido para detectar tendencias e identificar qué reclaman o necesitan las compañías en cuanto a la formación de sus equipos. Necesidades a las que damos respuesta con el lanzamiento de HomuorkLAB, la plataforma desde la que abrimos nuestros cursos MOOC a todo el mapa empresarial.
Agrupamos las temáticas para la formación empresarial en tres grandes verticales:
1.- Transformación y capacitación digital:
El poder de las redes sociales en la promoción de productos y captación de clientes es innegable. Facebook cuenta con 1.350 millones de usuarios, Twitter 320 e Instagram más de 400, con un crecimiento anual del 46%. Las empresas tienen la oportunidad de identificar y llegar a su target de audiencia ya sea a través de sus propios perfiles corporativos o a través de la presencia de sus trabajadores.
Cada vez más, las compañías se preocupan no solo por la creación de estrategias para los perfiles sociales de la firma, sino también por incentivar la participación y crecimiento de sus trabajadores en las redes. Una estrategia bottom up que entiende que contar con influencers en la empresa favorece el crecimiento de la red de contactos interesados en nuestro trabajo, el desarrollo profesional de la plantilla, la retención del talento y que juega a favor del prestigio de la compañía.
Al margen del trabajo en redes sociales, las organizaciones buscan formar a sus equipos en estrategias de marketing digital. El mercado del comercio electrónico crece a un ritmo del 30%, y buena parte de esta subida llega por ventas a través de buscadores. Los presupuestos destinados a posicionamiento en Google, Bing o Yahoo crecen año a año, por lo que resulta imprescindible formar a los equipos para trasladar su talento del marketing offline al marketing digital. Conceptos como SEM, SEO, SSI o CPC ya no pueden ser acrónimos irresolubles.
2.- Bienestar laboral:
Más de la mitad de trabajadores consideran que el estrés es un factor habitual en sus empleos y las empresas son conscientes de que en la mejora de esta situación está una de las claves para lograr rendimiento y sostenibilidad de sus equipos. Los departamentos de Recursos Humanos recurren, cada vez más, a técnicas como el Mindfulness para reducir la sensación de ahogo que pueden producir las dinámicas laborales.
El Mindfulness es la actitud de prestar atención plena a los acontecimientos de la vida. Desde hábitos tan rutinarios como comer hasta situaciones del día a día en nuestra faena. Su práctica mejora el desarrollo de la confianza personal, de la empatía y de la productividad gracias a una mayor atención y concentración, reduciendo hasta el 40% la angustia y el estrés.
Si bien las empresas siguen mostrando interés en ofrecer programas más tradicionales, como los de mejora en la organización del trabajo, técnicas de liderazgo y empatía, o métodos para abandonar el tabaco, que repercuten directamente en el bienestar del trabajador, prácticas como el mindfulness se imponen cada vez más como tendencia.
3.- Diversidad e igualdad de género:
Ya sea por convencimiento o por imperativo legal, cada vez son más las empresas que trabajan en la aplicación de políticas que igualen la situación de hombres y mujeres. La ley española obliga a las compañías de más de 250 trabajadores a tener su propio plan de igualdad de género y, ante la falta de cultura en este ámbito, hay un interés creciente en crear estrategias de detección de situaciones de desigualdad a través de casos prácticos y políticas exitosas aplicadas en otras firmas.
Desde Homuork, creemos en la importancia de desarrollar formas para la promoción del talento femenino a las posiciones de responsabilidad, crear políticas contra la discriminación de las mujeres por situaciones familiares o embarazos o concienciar sobre la brecha salarial.
Aún hoy, las mujeres tienen vetado el acceso a ciertos trabajos en países como Rusia, la baja maternal es opcional en Estados Unidos y la brecha salarial entre hombres y mujeres es de hasta el 20% en Francia. La concienciación de las empresas en este ámbito es el primer paso para corrección de estas situaciones y, además, los datos de la Organización Mundial del Trabajo demuestran que las compañías que aplican políticas de igualdad aumentan un 6% sus resultados económicos.
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