A estas alturas de la era 3.0 ningún responsable de RRHH, en España o fuera, debería ser ajeno al reto de conjugar los intereses de las diferentes generaciones que conviven en las empresas, alinear sus expectativas y desempeño, o generar sinergias que permitan crear entornos de mejora sostenibles.
En un ecosistema sociocultural ya de por sí complejo, hace unos años que ha empezado a cobrar fuerza el término Millennial, Generación Y o Generación Peter Pan, para identificar a la de aquellos nacidos a partir de 1982, nativos digitales acostumbrados a cohabitar en entornos presenciales y digitales al mismo tiempo, independientes y a la vez networkers, apolíticos pero firmemente comprometidos con movimientos cívicos y sociales, descreídos pero con ansias de cambiar el mundo.
Una generación que ya está incorporada a nuestro mercado laboral, que ha llegado pisando fuerte y nos reta a dar respuesta a nuevos interrogantes hasta hace poco desconocidos. ¿Estamos preparados en RRHH para ofrecer respuestas ante el cambio cultural que se avecina?
El comportamiento y las expectativas de los Millennials nos tienen a los departamentos de RRHH algo desconcertados, por no hablar de los CEO que, excepto en contadas startups, les llevan más de 20 años de ventaja – al menos en lo que a edad se refiere -.
Pero, ¿sabemos realmente qué esperan de las empresas en las que eligen trabajar?
Ser Millennial va más allá del geek de película americana que, en vaqueros y zapatillas, bebe una cerveza con sus compañeros mientras discute acaloradamente sobre nuevas tendencias jugando al futbolín.
Sara Landrum en un reciente artículo para la web chelseakrost.com a partir de las investigaciones desarrolladas por The Center for Generational Kinetics, habla en nombre de los nuevos trabajadores de esta generación acerca de los aspectos más valorados por ellos en sus empresas:
1. Aprendizaje continuo: entornos que les reten a adquirir nuevas competencias, innovar, no temer el error y luchar contra el tedio para potenciar el desarrollo de nuevas oportunidades. El Millennial aportará valor en la medida en que su Compañía se lo facilite y sobre todo, se lo reconozca.
2. Pasión: El Millennial necesita trabajar con la vista puesta en un objetivo y sentirse parte de algo grande; si su compañía es capaz de estimular sus actitudes positivas y colaborativas, obtendrá su compromiso y energía para alcanzar una misión común.
3. Espacios abiertos: No se trata solo de rodearse de colores agradables u oficinas soleadas y abiertas, sino del compromiso real de la organización con la promoción de entornos de trabajo colaborativos, relaciones escasamente jerarquizadas y flujos de comunicación multidireccionales y eficientes.
4. Foco en la salud: Claro que no desprecian un buen café o tener snacks gratuitos en la oficina, pero valoran que sus empresas les reconozcan y se preocupen por ellos a un nivel más individual y no como meras abejas productoras en una colmena. Así, es frecuente que pidan beneficios orientados a la mejora de sus hábitos de vida, como servicios de nutrición o acuerdos con gimnasios.
5. Actitud colaborativa: Los Millennial se rebelan contra la creencia infundada de que son seres individualistas e incluso egoístas, y muestran su firme compromiso con iniciativas de colaboración y mejora social. En este sentido prefieren trabajar en compañías que promuevan el voluntariado entre sus empleados e incluso destinen parte del tiempo y los recursos corporativos a fines de cooperación.
6. ¿Horarios?: El presentismo y la falta de flexibilidad para organizar los tiempos de trabajo son elementos a erradicar en la nueva cultura de esta generación. Prefieren así empresas que respeten su ocio y les ofrezcan opciones para la gestión individual y responsable de los tiempos, eliminando el foco del control para colocarlo en la productividad.
7. Compensación y beneficios sociales: Para estos empleados la obtención de variables ligados a su desempeño así como el disponer de nuevos incentivos y beneficios sociales tanto para ellos como para sus familias no es solo una forma de retribución, sino que les hace sentirse reconocidos en su esfuerzo y por tanto mejora su compromiso y contribución al proyecto.
Este es el cambio que ha venido para quedarse. Estos son los líderes del futuro, de uno real, no de ciencia ficción.
Empresas en general y responsables de personas en particular: Subámonos a este carro, aceptémoslo como palanca para la mejora de nuestras culturas corporativas, para el allanamiento de las estructuras y el desarrollo de las competencias y la comunicación, abramos nuestras mentes y, tengamos la edad que tengamos, atrevámonos a decir: querido CEO, yo también quiero ser Millennial.
Ana López Seisdedos es la Ganadora de la 6ª Edición del Premio Literario RRHHDigital.com
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