La identificación del talento en los procesos de selección ha cobrado en los últimos años un nuevo impulso al incorporar a su gestión nuevas herramientas que agilizan los procesos sin perder ni un ápice de efectividad. Instrumentos como los mapas de talento que, aplicados a la selección, detectan con precisión casi quirúrgica las necesidades específicas de la organización y permiten diseñar una selección a la medida en un tiempo muy reducido.
No siempre los departamentos de recursos humanos están sabiendo sacar el máximo partido a los procesos y herramientas de evaluación del talento, especialmente para potenciar su marca de empleador con los candidatos. Este hecho generalmente provoca en los candidatos una percepción de que los procesos de evaluación son un mal necesario para acceder a un puesto de trabajo.
Una buena parte de las empresas siguen dedicando sus esfuerzos en tratar de convencerse de que tienen delante a la persona adecuada, y muy pocos en aprovechar los sistemas de evaluación para persuadir a esa persona de que tiene ante sí una posibilidad única de entrar a formar parte de un gran proyecto.
La incorporación de recursos audiovisuales hipermedia en las herramientas de evaluación online, la gamificación y los mapas de talento, pueden facilitar que el candidato viva una experiencia más emocional y menos invasiva. Y todo esto sin renunciar al rigor y objetividad con los que tenemos que asegurar la adecuación de las personas que queremos que trabajen con nosotros.
Y es que el tiempo que dedicamos a evaluar a una persona es demasiado valioso como para conformarnos solamente con conocer su ajuste a un puesto o su potencial.
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