Una gestión de los procesos de gastos deficiente que provoca que a un tercio de las empresas tarde al menos ocho días aprobar y reembolsar un informe de gastos. Dejar el cumplimiento en manos de los empleados o auditar manualmente los informes de gastos es un enfoque incoherente que deja a las empresas vulnerables ante los gastos fraudulentos o excesivos.
El 52 % de las empresas siguen confiando en los procesos de gestión de gastos manuales, a pesar de que conllevan altos costes de procesamiento, falta de control, una visibilidad inadecuada de los gastos, una aplicación deficiente y un incumplimiento de las políticas de viaje, además de plazos de reembolso largos para los empleados.
Así, lo pone de manifiesto el Informe de Tendencias de la gestión de gastos 2021, publicado por Emburse Captio, que tiene como base 515 entrevistas a profesionales de las finanzas de todos los sectores.
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