Patrullaba el caballo con su compañero por la céntrica Plaza de España, cuando, distraído, tropezó con la rejilla de ventilación del metro.
El rocín de la policía sufrió una aparatosa caída. El accidente le provocó heridas y magulladuras. "Sangraba de forma espectacular", cuenta una testigo.
El caballo fue vendado y trasladado, no sin problemas, a la Facultad de Veterinaria, dondre un primer examen determinó que no se había roto ningun pata. "No habrá que sacrificarlo, en absoluto", comentaron fuentes de la Policía Nacional.
Los comentarios están cerrados.