Treinta personas, entre ellas 16 funcionarios, han sido sancionadas por su responsabilidad en el derrumbamiento de una mina de yeso que provocó la muerte de 33 personas, en la provincia septentrional china de Hebei, informó hoy el rotativo local "Yanzhao City Daily".
Dai Zhanyin, teniente alcalde de la ciudad de Xingtai, y otros 15 funcionarios locales han recibido sanciones administrativas y del Partido Comunista de China (PCCh), como advertencia, degradación, dimisión e investigación sobre la presunta violación de la normativa de seguridad laboral.
Zhang Yukui, propietario de la planta, y otras 14 personas consideradas responsables directos del accidente fueron acusadas de negligencia al no prevenir los riesgos laborales.
La mina yesera Kangli, ubicada en el pueblo Shangwang de Xingtai, se derrumbó en el 6 de noviembre de 2005 y se cobró la vida de 33 personas, además de dejar heridas a otras 40 y desaparecidas a cuatro. Además, el accidente enterró un edificio de dos pisos y deterioró dos minas vecinas, con unas pérdidas de 7, 74 millones de yuanes (992.000 dólares USA).
Un grupo de investigación creado por el Consejo de Estado ( gabinete chino) descubrió que las tres minas no tenían licencia de seguridad laboral, pero continuaban la producción incluso después de recibir la órden de suspender la producción para recibir una inspección de seguridad laboral.
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