egún el estudio realizado por élogos El estado del arte de la formación en España, el mercado de español está aún alejado de los más de 600 euros por empleado que se invierten en los países europeos, aunque aumentan más del 10% las horas dedicadas para la formación de cada uno de ellos.
Este estudio, que hasta este año se realizaba de forma individual para cada uno de los sectores implicados (Grandes Empresas, Administración Pública y Agentes Sociales), recoge por primera vez datos comparativos sobre las modalidades y las áreas clave para los demandantes de formación.
Entre sus conclusiones destaca el descenso de la formación presencial (en torno al 5%), a favor del blended-learning, modalidad que combina metodología y tecnología (formación presencial y online) y del crecimiento del e-learning, que representa ya el 11% del total de la formación en España, experimentando un crecimiento del 30% (165 millones de euros en el ejercicio 2006).
La formación on-line ha crecido sustancialmente en el Sector Empresarial (casi un 40%), como lo hizo el pasado año en Agentes Sociales; y se espera que 2007 sea el año en que se generalice su uso en las Administraciones Públicas (actualmente, el e-learning representa un 7% del total de sus planes de formación). Una de las causas de este incremento es la implementación de fuertes inversiones para la mejora tecnológica de las plataformas de aprendizaje –LMS- y del desarrollo de contenidos. La oferta y la demanda, tras años de lenta puesta en marcha del sector, han madurado, desarrollándose una cultura que utiliza el e-learning para implantar programas formativos diseñados combinando formación presencial y contenidos on-line, que mejorarán la transferencia al puesto de trabajo.
En cuanto a las áreas de mayor demanda de la formación, en Grandes Empresas y Agentes Sociales se dan grandes similitudes, destacando fundamentalmente la formación en productos y procesos (formación técnica-corporativa, en torno al 35% en ambos sectores) y de habilidades comerciales y de liderazgo, que copan un 15% de la formación de Agentes Sociales, en torno a un 18% en Administración Pública y un 25% de la formación empresarial. Este ascenso se produce en detrimento de la formación en Ofimàtica, dada la mayor apuesta por las soluciones de idiomas o liderazgo.
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