La muerte de cuatro trabajadores de la construcción el pasado lunes hizo saltar por los aires la media estadística de un fallecido en accidente laboral cada dos días laborables. El departamento de Treball anunció ayer la apertura de una investigación de los siniestros ocurridos en Barcelona, Sabadell y Reus, cuyo resultado trasladará a la fiscalía para que actúe si aprecia un delito penal.
El director general de Relacions Laborals, Salvador Álvarez, indicó que "si se comprueba que los empresarios han incumplido sus obligaciones preventivas", la inspección propondrá la correspondiente sanción y un recargo en las cotizaciones a la Seguridad Social.
La caída de dos albañiles pakistanís desde un andamio situado a 20 metros de altura en Barcelona se produjo, según el sindicato CCOO, por un cúmulo de circunstancias entre las que destacó el uso de una pieza no homologada que se soldó en el mismo edificio en construcción. Además, los dos trabajadores, que pertenecían a una empresa de Badalona que instalaba un recubrimiento de mármol, no utilizaron el arnés de sujección que tenían a su disposición en un andamio equipado con barandillas de protección.
CAÍDAS
En Sabadell, un joven de 27 años fue encontrado muerto en el interior de una cuba de una hormigonera que estaba limpiando. Los bomberos apuntaron que la caída se produjo posiblemente por un resbalón, informa Albert Segura.
La cuarta víctima mortal, de nacionalidad chilena, se registró en Reus y también murió por una caída, en esta ocasión desde un tejado, en un momento en el que había fuertes rachas de viento. CCOO pidió a Álvarez un pacto para reducir la accidentalidad en la construcción, que ya suma 10 víctimas mortales este año en Catalunya. El líder del sindicato, Joan Coscubiela, calificó de "intolerable" la situación y pidió un "cambio de cultura empresarial".
El director de Relacions Laborals indicó que, pese a la acumulación de cuatro víctimas en un día, la cifra global de empleados fallecidos este año ha bajado con respecto a la del 2006. A su juicio, es necesario que "las empresas de la construcción cambien el diseño de las obras e inviertan en prevención de principio a fin". Esa inversión ha de incluir, según Salvador Álvarez, "una formación en el tajo en lugar de exclusivamente teórica" con especial énfasis en los inmigrantes porque, en ocasiones, "tienen más dificultades en entender sus obligaciones".
El responsable de salud laboral de UGT, Dionís Oña, pidió nuevas medidas como una coordinación más eficaz entre Treball y la fiscalía y delegados de prevención por territorios o sectores para las pequeñas empresas para superar "la aplicación burocratizada" de la ley.
Los comentarios están cerrados.