La Comisión Europea presentará este miércoles día 21 una nueva estrategia sobre salud y seguridad en el trabajo para el periodo 2007-2012 con la vista puesta en la reducción de la siniestralidad laboral, especialmente en el colectivo de los jóvenes, los trabajadores mayores y los inmigrantes.
Bruselas considera que gracias al actual plan sobre salud y seguridad laboral, la situación ha mejorado radicamente en los Estados miembros durante los últimos seis años, porque ahora se conciben las estrategias nacionales de manera más acertada. De hecho, las cifras muestran que se han reducido en un 17% los accidentes mortales y en un 23% los accidentes responsables de bajas laborales de más de tres días.
En todo caso, el Ejecutivo comunitario considera que esta disminución de la siniestralidad no se produce de manera homogénea porque en determinadas categorías de trabajadores, como los jóvenes, los mayores o los inmigrantes, en las pequeñas y medianas empresas o en algunos sectores de actividad, como la construcción, la agricultura, los transportes, los servicios médicos y sociales las tasas son claramente superiores a la media de la UE. Lo mismo pasa en función de los Estados miembros.
Además, van en aumento algunas enfermedades profesionales, como los problemas musculares y óseos, las infecciones y las enfermedades provocadas por la tensión psicológica. Así pues, el objetivo principal de la nueva estrategia comunitaria es la reducción 'continua, duradera y homogénea' de los accidentes laborales y las enfermedades profesionales en el conjunto de la Unión Europea.
Para ello, el responsable de Empleo de la Comisión Europea, Vladimir Spidla, cree necesario, en primer lugar, definir y poner en marcha estrategias nacionales basadas en una ajustada evaluación de la situación concreta del país. En segundo lugar, garantizar una mejor aplicación de la legislación a través de medidas que vayan desde la simplificación legislativa hasta el intercambio de buenas prácticas pasando por las campañas de sensibilización, los incentivos económicos y una mejor información y formación para cambiar el comportamiento de trabajadores y empleadores.
Integrar la dimensión de la salud la seguridad en el trabajo en otras áreas políticas, como la educación, la salud pública o la investigación figura asimismo en el plan del comisario Spidla, que también apuesta por mejorar la identificación y evaluación de los riesgos laborales potenciales.
Los comentarios están cerrados.