La consellera de Trabajo y Formación, Margarita Nájera, anunció ayer que en un plazo de dos o tres semanas presentará un plan de choque contra la siniestralidad laboral en Baleares, tras consultar a sindicatos y patronales de las islas sobre el tema y concluir que la lucha contra los accidentes en el trabajo “es una tarea de todos los agentes económicos”.
Tras mantener una reunión con el secretario general de UGT en Baleares, Lorenzo Bravo, Nájera reveló que una de sus primeras tareas tras asumir el cargo fue firmar varios expedientes sancionadores contra empresas de las islas, algunos de ellos por incumplimiento de la ley de Prevención de Riesgos Laborales y que, según criticó, permanecían guardados en el cajón del anterior titular de Trabajo, Cristóbal Huguet.
La consellera aseguró que en estos momentos, se están analizando cuáles son las alternativas para afrontar la situación “vergonzante” que, a su juicio, supone que el archipiélago sea una de las primeras Comunidades Autónomas con un mayor nivel de siniestralidad laboral leve.
En este sentido, dijo que el Govern está haciendo un seguimiento de las empresas que tienen un mayor problema de siniestralidad y, además, añadió que la Conselleria está buscando soluciones en varios frentes, razón que la llevó la semana pasada a mantener un encuentro con su homóloga en la Generalitat de Catalunya con el fin de conocer cómo está afrontando la siniestralidad laboral esta Comunidad.
Por su parte, Bravo denunció que, actualmente, “faltan medios económicos y de inspección” en Baleares y, en esta línea, criticó que en la pasada legislatura, el Govern de Matas “hizo poco caso” en materia de seguridad a los sindicatos, que en el caso de UGT, “tuvo que dedicar cinco personas a salud laboral y nombró a 1.000 delegados en prevención de riesgos laborales”.
El secretario general de UGT remarcó que “independientemente de que las instituciones deben tener mano dura” con las empresas que incumplen la Ley de Prevención en Riesgos Laborales, lo primero que tienen que hacer los empresarios es mostrar a sus trabajadores el ‘mapa de riesgos’, algo que, según denunció, “lo hacen muy pocos”.
Por otro lado, el dirigente sindical confió en que con la nueva consellera de Trabajo, “se abra un nuevo marco de relaciones laborales” en Baleares, con el fin de “orientar” la economía de las islas y ver “cuál va a ser el futuro para los habitantes y los trabajadores de esta Comunidad en materia de formación, construcción y turismo”.
Así, Bravo sostuvo que lo más importante durante esta legislatura será lograr un pacto social, con el objeto de planificar la economía sobre la base que hay un “cambio de modelo turístico y un exceso del consumo del territorio”, debido a que, en su opinión, actualmente, hay una “improvisación que nos va a llevar a un callejón sin salida”.
Concertación y diálogo
De esta forma, la titular de Trabajo del Govern remarcó que la principal herramienta de trabajo durante los próximos cuatro años va a ser la “concertación y el diálogo” y, en esta línea, señaló que está manteniendo reuniones con los sindicatos y patronales para conocer las “amenazas” que existen en Baleares desde el punto de vista del empleo y los ámbitos en los que se debe trabajar.
Nájera avanzó que en las próximas semanas, el presidente del Ejecutivo, Francesc Antich, mantendrá encuentros con UGT y CC.OO. para iniciar el proceso de concertación con los agentes sociales y económicos, con la pretensión de pactar las estrategias que permitan “mejorar” la situación económica de las islas.
Finalmente, la consellera destacó que tras conocer el diagnóstico de la economía balear, sus prioridades serán garantizar la seguridad laboral y “resolver la carencia” de la formación de los trabajadores y de la presencia de las nuevas tecnologías en las empresas.
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