El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha aprobó en su reunión de ayer, a propuesta de la Consejería de Administraciones Públicas, la creación de 34 plazas para los Cuerpos Técnico y Superior de Prevención de Riesgos Laborales, dentro de la Oferta de Empleo Público de Castilla-La Mancha de este año 2007.
Esta medida beneficiará a los casi 70.000 empleados públicos de la Junta de Comunidades, que verán así mejorada la seguridad en sus respectivos puestos de trabajo. Se trata, por tanto, de una acción que consolida a la Administración autonómica de Castilla-La Mancha y, por tanto, a la primera empresa de la región, como ejemplo en materia de lucha contra la siniestralidad laboral.
La Junta de Comunidades considera que debe ser "pionera" en la puesta en marcha de proyectos e iniciativas que sean garantía de calidad de vida para los trabajadores y los ciudadanos, informó la Junta en nota de prensa.
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