El 11 por ciento de los médicos padece trastornos psíquicos o de adicción, un problema ante el que los facultativos abogan por 'superar los tabúes' y 'romper la conspiración del silencio y el corporativismo'.
Así informó la Organización Médica Colegial (OMC), que ha difundido ayer las conclusiones de un amplio grupo de expertos sobre los límites de la Medicina en el siglo XXI, puestas de manifiesto en unas Jornadas Técnicas Colegiales celebradas en Bilbao.
En la mesa redonda titulada '¿Qué hacer ante un médico con su capacidades físicas o mentales disminuidas?', los especialistas han recordado que el Código Deontológico obliga al médico a denunciar los casos que conozca de compañeros con deterioro de su actitud profesional.
'Los Colegios Médicos deben implicarse en la ayuda del doctor enfermo, a través de las Comisiones Deontológicas', han sentenciado los ponentes.
La estrategia pasaría además por potenciar los planes de Atención Integral al Médico Enfermo (PAIME), que tienen como finalidad el retorno laboral de los profesionales para que puedan ejercer la medicina de una forma segura para su salud y la de sus pacientes.
Todos han apostado por ejercer una 'función fiscalizadora' sobre el ejercicio profesional sin miedo a la presión del ambiente laboral.
A juicio de los expertos, la 'vigilancia continuada' es la mejor estrategia para el diagnóstico precoz de los trastornos psíquicos, que impiden al facultativo ejercer la medicina con la habilidad 'razonable y precisa'.
'La ayuda al doctor enfermo debe basarse en una alianza donde se implique la Administración Sanitaria y los Colegios Profesionales porque ayudando al médico beneficiaremos al ciudadano', han agregado los participantes.
Para los colegios profesionales, debería ser un objetivo prioritario la protección del ciudadano 'cuidando a sus médicos enfermos'.
Los comentarios están cerrados.