El Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales ha invertido tres millones de euros en una campaña estatal para la prevención de accidentes laborales que se difundirá en prensa escrita, revistas, Internet y otros canales desde hoy hasta finales de noviembre.
Según explicó en rueda de prensa el ministro de Trabajo, Jesús Caldera, el objetivo de esta campaña, que lleva por lema '365 días sin accidentes son buenos días para todos', es el de desarrollar y consolidar la cultura preventiva entre la sociedad española.
Esta campaña forma parte de la Estrategia Española de Seguridad y Salud en el Trabajo 2007-2012, aprobada en el Consejo de Ministros el pasado mes de junio con el acuerdo de sindicatos, empresarios y comunidades autónomas.
El mensaje de esta iniciativa es que, tanto si se es empresario como trabajador, debe exigirse un trabajo seguro. Con ello se pretende concienciar a la sociedad sobre la importancia de la prevención de riesgos laborales, especialmente entre empresarios y trabajadores.
El secretario general de Empleo, Antonio González, presente también en esta rueda de prensa, precisó que la idea de la campaña no es dramatizar sobre los accidentes laborales, pues todo el mundo es consciente de que son trágicos, sino la de transmitir que son evitables y que ello exige una labor cotidiana.
Para la difusión de esta campaña se utilizarán cadenas de televisión nacionales y autonómicas, que emitirán spots de 25 y 10 segundos en los que se representan escenas cotidianas de riesgos laborales en sectores de alta siniestralidad, como la construcción, la agricultura o la industria.
En radio, además de las cuñas convencionales, se contemplan acciones específicas por parte de los principales conductores de programas radiofónicos españoles, que a las ocho de la mañana se dirigirán a sus oyentes con un '¿Buenos días?. Buenos días'. Junto a estos medios, se utilizarán otros canales, como Internet, carteles en el Metro, en RENFE y en cabinas telefónicas, para difundir esta campaña.
UNA INICIATIVA NECESARIA.
Caldera definió esta iniciativa como "necesaria" porque, a pesar de que los accidentes laborales están bajando, todavía siguen siendo muchos. Precisamente, el objetivo de la Estrategia de Seguridad Laboral es el de reducir los siniestros entre un 20% y un 25%, al objeto de que España consiga situarse, "al menos", en la media europea. Junto a la Estrategia, el ministro recordó que se han puesto en marcha otras medidas que están contribuyendo a reducir la siniestralidad, como la mayor estabilidad laboral que ha conseguido la reforma del mercado de trabajo, el proceso de normalización de extranjeros, la ley reguladora de la subcontratación en la construcción y el reforzamiento de la plantilla de la Inspección de Trabajo, que en los últimos cuatro años ha recuperado 400 efectivos.
Todo esto, dijo Caldera, explica que los accidentes laborales se hayan reducido un 5,33% en el último año, situándose en el nivel más bajo en 21 años, o que el índice de incidencia (que mide el número de siniestros por cada 100.000 trabajadores) haya caído un 22% desde 2001.
Pero, a pesar de estas mejoras, el ministro insistió en que hay que seguir haciendo esfuerzos para combatir la siniestralidad. "No hay soluciones instantáneas, pero si nos esforzamos, seguro que los reduciremos", subrayó.
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