Cada año 3.000 personas fallecen en España a causa de la gripe, una enfermedad que afecta al 25 por ciento de la población y que provoca la mitad de las bajas laborales, con un costo anual de más de 210 millones de euros.
Así se desprende de la encuesta sobre la vacunación antigripal, realizada entre más de mil personas mayores de quince años, y que han llevado a cabo la Asociación Española de Pediatría (AEP) y la Sociedad Española de Quimioterapia (SEQ) sobre esta patología.
Pese a que cerca del 70 por ciento cree que es "poco o nada grave", los expertos aseguraron ayer, en rueda de prensa, que es necesario mejorar la vacunación y ampliar la población a la que se le aplica, dada la importante demanda de recursos sanitarios, el coste laboral y la morbilidad y mortalidad que conlleva.
El 25 por ciento de la población se vacuna contra la gripe, según ha indicado el presidente de la SEQ, José Angel García, pero este porcentaje es "insuficiente" entre lo pacientes de mayor riesgo: los mayores de 65 años, los niños, los fumadores y los que padecen problemas respiratorios u otros procesos crónicos.
El coordinador del Grupo de Estudio de la Gripe, Ramón Cisterna, ha puntualizado que el 70 por ciento de los mayores de 65 años recibe este tratamiento, una proporción que disminuye al 60 entre los diabéticos, al 50 entre quienes sufren cardiopatías y a un 40 entre quienes tienen problemas respiratorios.
El análisis revela un dato alarmante sobre el personal sanitario, ya que tan sólo se vacuna el 10 por ciento pese a estar en contacto continuo con los niños, los enfermos, inmunodeficientes y personas con un elevado riesgo de sufrir complicaciones.
Cisterna ha abogado por ampliar el campo de vacunación a los niños de entre seis meses y cinco años, puesto que actualmente esta recomendada para los pequeños de entre seis y dieciocho meses, sobretodo en aquellos que sufren patologías crónicas delicadas.
El coordinador del Comité Asesor de Vacunas de la AEP, Enrique Bernaola, ha informado de que el calendario vacunal de 2008 recogerá esta última indicación para los niños, elemento esencial para la diseminación de la gripe, al tener mayor carga viral y prolongarse ésta al menos el doble de tiempo que en los adultos.
Se recomienda también a las mujeres embarazadas, que prevean dar a luz entre los meses de noviembre a marzo, la vacunación a partir del segundo o tercer trimestre de gestación.
Los expertos abogan por descender de los 65 años a los 50 la recomendación del fármaco, porque un tercio de las personas de más de 45 años padece alguno de los factores de riesgo.
De los fallecidos por esta causa en España, según el sondeo, el 90 por ciento fueron ancianos y se estima que murieron víctimas de la gripe entre quince o veinte niños.
El doctor Alfonso Delgado, presidente de la AEP, ha sentenciado que "antes o después llegaremos a vacunar a todos los niños", algo que, según diversos estudios, reduce la mortalidad derivada de las complicaciones de la enfermedad.
El doctor ha expresado su convencimiento de que la vacunación de la población general sería coste-efectiva, si se comparan los gastos directos e indirectos que conlleva la patología con los del tratamiento.
En esta línea se ha pronunciado Cisterna, quien ha sostenido que la vacuna no tiene "límite de recomendación" porque puede recibirla cualquier persona y las contraindicaciones son "realmente escasas", por lo que es el "equilibro" entre el interés general y el presupuesto público lo que frena su mayor aplicación.
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