La Junta de Andalucía invertirá diez millones de euros en la construcción de un laboratorio-observatorio de I+D+i en prevención de riesgos laborales que será pionero en Andalucía y funcionará, según el plazo previsto, en 2011, fecha en la que se habrán concluido las obras del mismo en el Parque Tecnológico de Ciencias de la Salud (PTS), en Granada.
El centro, en el que trabajarán expertos universitarios, investigará sobre nuevos instrumentos tecnológicos para aportar seguridad en el trabajo y será, al menos ese es el propósito, referente en el sur de Europa, según explicó ayer en rueda de prensa el consejero de Empleo, Antonio Fernández, tras firmar el convenio con el PTS para la cesión de suelo y la futura construcción del centro.
Empleo prevé invertir en su construcción unos diez millones de euros, a lo que se sumarán otros cuatro millones para el equipamiento. Se trata del tercer centro de la red de laboratorios-observatorios que Empleo pone en marcha, a través del Instituto Andaluz de Prevención de Riesgos Laborales, tras el de Jaén y Huelva.
El objetivo es investigar sobre los nuevos riesgos y métodos de prevención derivados de los cambios del mercado laboral, con fenómenos como la feminización y el envejecimiento de los trabajadores; la aparición del estrés, la depresión o el acoso en el trabajo, explicó Fernández.
Esta anticipación a los riesgos emergentes, tanto a los que proceden de las innovaciones técnicas como a los derivados de la evolución social, viene recogida en el Plan General de Prevención de Riesgos Laborales, así como en el VI Acuerdo de Concertación Social. La red de centros se convertirá en un servicio permanente de información para empresas, universidades y profesionales, además de un espacio público para la investigación y la difusión de conocimientos.
En el caso de Granada, el laboratorio, desarrollado por un equipo de investigadores universitarios, gestionará proyectos de I+D+i y fomentará el registro de patentes como resultado de su actividad investigadora.
Según adelantó el consejero, los desarrollos tecnológicos obtenidos podrían ser explotados comercialmente por las empresas participantes. Entre otros instrumentos, se generarán herramientas para la telemedicina -diagnóstico y seguimiento a distancia del paciente-, nanosensores para el registro postural, prototipos de maquinaria o indumentaria, etc.
Asimismo, se ofrecerán servicios de prevención en nuevos puestos de trabajo, de prescripción de calidad de vida, de investigación para empresas, de evolución ergonómica, de generación de bases de datos, de formación a profesionales y de apoyo a la rehabilitación, entre otros. Todo ello se difundirá a través de una página web.
El edificio contará con cinco plantas sobre rasante y 6.000 metros cuadrados, además de otros 4.000 para aparcamientos.
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