CCOO de Navarra ha denunció ayer la existencia de "empleo sumergido" en algunas becas de formación, especialmente, según el sindicato, en las que convocan las empresas unilateralmente, sin firmar un convenio de colaboración con una entidad educativa.
responsable de Juventud de CCOO de Navarra, Rubén Belzunegui, quien ha presentado en conferencia de prensa un estudio del sindicato sobre este colectivo, ha mostrado la "seria inquietud" existente en relación a los becarios, que en muchas ocasiones "están ocupando puestos de trabajo" de una forma "casi gratuita".
Las becas en empresas, ha indicado Belzunegui, "esconden" en muchas ocasiones jornadas completas o turnos que "impiden la formación" y por salarios que generalmente no llegan a los 400 euros mensuales.
Belzunegui ha comentado que las becas se comenzaron a convocar en España a principios de los años noventa en el ámbito de la investigación académica, aunque progresivamente se fueron extendiendo a todos los sectores hasta llegar a una situación en la que un 20% de los jóvenes pasan por este "peaje obligatorio".
El estudio de CCOO hace especial hincapié en tres tipos de becas: las que firman las empresas con las universidades al amparo de un convenio de cooperación educativa, las que se desarrollan en el seno de la Administración pública y las que ofertan las empresas de forma unilateral, que para el sindicato son "las más preocupantes".
Las becas amparadas en convenios con universidades, ha explicado, se ofertan a estudiantes con un mínimo del 50% de los créditos de la carrera terminados, pero, al no establecerse un tope máximo, se conceden generalmente a alumnos ya titulados, con lo que "no se asegura la finalidad formativa" de la beca.
Belzunegui ha declarado que en la Administración navarra también existe un "considerable volumen de becas", aunque hizo especial hincapié en las becas convocadas de forma unilateral por las empresas para "ocultar puestos de trabajo" por salarios "irrisorios".
La secretaria de Acción Sindical de CCOO de Navarra, Pilar Arriaga, ha afirmado que éste es un "colectivo invisible", sobre el que no existen datos precisos, aunque se calcula que, en 2006, había en España 160.000 becas por convenios de cooperación educativa y 3.000 en las administraciones públicas, además de unas 40.000 convocadas unilateralmente por empresas, según datos del Ministerio de Trabajo.
Arriaga ha afirmado que CCOO ha decidido "intervenir firmemente" para evitar estas "situaciones fraudulentas" y en este sentido ha anunciado que Inspección de Trabajo va a desarrollar en Navarra un "programa piloto" de vigilancia de las condiciones laborales de los becarios.
CCOO, ha señalado, no está en contra de las becas de formación en empresas, pero considera que se deben limitar al periodo de la enseñanza reglada, prohibiéndose de manera expresa su concesión a jóvenes que hayan finalizado sus estudios, y se les debe dotar de contenidos didácticos.
Además, el sindicato solicita a la Administración la creación de un "registro" de becarios para poder cuantificar la situación y pide a Inspección de Trabajo que investigue la existencia de posibles relaciones laborales "encubiertas" tras las becas.
Arriaga ha destacado que, de los aproximadamente 5.000 convenios existentes en España, sólo 24 regulan la situación de los becarios y el resto, cuando los citan, es generalmente para excluirlos del convenio.
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