El índice de siniestralidad laboral en Tarragona se redujo el año pasado un 6,8% respecto a los datos de 2006, según informó ayer el director general de Relaciones Laborales de la Conselleria de Trabajo, Salvador Álvarez, quién destacó que este índice supuso "el valor mínimo" de los últimos ocho ejercicios tanto en Tarragona como en el conjunto de Catalunya.
Los accidentes mortales disminuyeron en un 17,5%, los graves un 4,3% y los leves un 6,8%. Pese a esta reducción, la incidencia de accidentes laborales de Tarragona está todavía algo por encima de la media catalana, puesto que en 2007 Tarragona registró 5.770 accidentes laborales por cada 100.000 trabajadores, mientras que en Catalunya esta tasa se situó en 5.724 accidentes.
El director general de Relaciones Laborales alertó sobre la necesidad de "no bajar la guardia" porque los accidentes "no sólo tienen efectos sobre la salud de las personas, sino que también comportan un perjuicio para la productividad de las empresas".
Por sectores, en la industria fue donde más se redujo la siniestralidad en un 10,35%, mientras que los servicios experimentaron una bajada del 6,9% y la construcción, del 6%. La nota negativa la aportó la agricultura, sector en el que hubo un aumento del 17,6%. No obstante, el bajo número de asalariados en el sector primario hace que un incremento de los accidentes enseguida represente aumentos porcentuales importantes.
La reducción de los accidentes permitió ahorrar 1,8 millones de euros en costes salariales en la provincia, puesto que el número de jornadas de trabajo pérdidas por causa de baja por accidente se redujo un 12,2%, con un total de 279.412 jornadas.
La media de días de baja de los accidentes leves registrados fue de 17 días, mientras que los graves comportaron 121 días de baja. Según las estimaciones hechas por la Conselleria de Trabajo, el coste salarial de los accidentes de trabajo fue el año pasado de unos 21,4 millones de euros en Tarragona, un 7,9% menos que en 2006.
Sin embargo, el coste laboral medio se incrementó un 4,8%, pasando de 2.193,32 euros mensuales por trabajador en el tercer trimestre de 2006 a 2.300,68 euros en el mismo periodo de 2007.
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