Los titulados por la Universidad de Extremadura o aquellos titulados por otras universidades españolas que residan en la región tienen de plazo hasta el 15 de marzo de 2009 para solicitar una de las 190 Becas Quercus.
El vicerrector de Coordinación y Relaciones Institucionales, Segundo Píriz, junto con el director general de Universidad y Tecnología, Francisco Quintana Gragera y el director gerente de Fundecyt, Luis Casas, presentaron ayer esta tercera edición, cofinanciada por el programa comunitario Leonardo da Vinci y la Consejería de Economía, Comercio e Innovación.
Así, gracias a las Becas Quercus, 190 titulados podrán realizar estancias formativas en empresas y organizaciones de 12 países europeos, que son Alemania, Austria, Bélgica, Francia, Grecia, Irlanda, Italia, Polonia, Portugal, República Checa, Reino Unido y Suecia.
Unas estancias en las que Quercus III financia los gastos de manutención, viaje, seguro y una preparación ligüística y cultural. El importe total de cada una de ellas se calculará en función de la duración de la estancia, una media de seis meses, y el coste de vida del país de acogida correspondiente. Se estima que las cantidades finales oscilarán entre los 4.801,77 y los 6.297,77 euros.
SEIS BECAS PARA DISCAPACITADOS
Como novedad en esta edición, se contemplan seis becas dirigidas a titulados discapacitados con el objetivo de garantizar a todos por igual el acceso al mundo laboral. Estos becarios recibirán el doble de la dieta máxima para manutención.
También se han incluido universidades e instituciones públicas como organizaciones de acogida. En ocasiones anteriores sólo se podían desempeñar las prácticas en entidades privadas.
En su intervención, el vicerrector de Coordinación y Relaciones Institucionales, Segundo Píriz destacó la evolución que han experimentado las Becas Quercus a lo largo de sus tres ediciones. En la primera se ofertaron 98 plazas y en Quercus II 140 con 1.021 candidatos registrados. "Se han incrementado en 50 el número de plazas así como la dotación económica", explicó.
Así, añadió que los resultados de la Quercus II fueron "muy positivos", ya que 16 becarios fueron contratados por su empresa de acogida, 20 encontraron trabajo en otra empresa gracias a la beca, 18 rechazaron una oferta de empleo de su empresa por razones personales y seis se quedaron en el país de destino o regresaron para buscar trabajo y mejorar su nivel lingüístico.
Por su parte, Luis Casas Luengo definió las Becas Quercus como "una magnífica herramienta de acceso al mercado laboral", y resaltó que atendiendo a los resultados "se demuestra que hay una alta empleabilidad después de su etapa de formación en Europa".
Sobre todo favorece, subrayó el Director Gerente de Fundecyt, "a las carreras con acceso más restringido al mercado laboral, como sucede con las titulaciones de letras.
Para finalizar, Francisco Quintana aseguró que "la política de movilidad es una apuesta clara de la Junta y de la UEx, marca que nos diferencia de otras comunidades autónomas".
En definitiva, las Becas Quercus tratan de reducir las barreras de acceso al mercado de trabajo para favorecer la futura inserción laboral, mejorar las competencias ligüísticas, potenciar las carreras profesionales internacionales y conocer nuevas formas de trabajo en un ambiente multicultural.
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