Responsables de los sindicatos CIG, CCOO y UGT en Ourense denunciaron, que las mutuas ocultan accidentes laborales, hacen partes en los que reducen su gravedad, o califican de enfermedad común dolencias profesionales que están causadas por contaminantes o por un trabajo repetitivo.
El responsable de CIG, Etelvino Blanco, explicó que las obras del AVE en la provincia mostraron una «práctica común en diferentes mutuas de empresas de cualquier sector» de manipular los partes de accidentes, incluso en las empresas más conocidas y de mayor número de trabajadores.
Como ejemplo, se refirió al accidente ocurrido en las obras del AVE de O Carballiño en septiembre de 2007, que se saldó con un muerto y cuatro heridos «algunos de ellos graves y sin embargo la mutua los calificó de leves».
«Antes de ese accidente -añadió- detectamos varios casos de trabajadores accidentados en el tajo que fueron enviados al centro de salud de O Carballiño para ser atendidos por la sanidad pública como si fuesen víctimas de un accidente en su casa».
El resultado de estas actuaciones, según Blanco, es que los partes falseados reflejan un número más bajo de siniestros laborales, «y esto favorece a la empresa que paga a la mutua, ya que el Gobierno está a punto de aprobar ayudas para las que registran menos accidentes laborales en su historial», y por eso están denunciadas en el juzgado.
Además, según el sindicalista, el desvío de enfermos a la sanidad pública supone un ahorro considerable a la mutua, que debería hacerse cargo de ellos si los declarase como enfermos profesionales.
En ese sentido, el responsable provincial de CCOO, José Gómez, explicó que las enfermedades ocasionadas por elementos contaminantes y las dolencias musculo-esqueléticas derivadas de un trabajo mecánico y repetitivo, «son tratadas como enfermedad común y la mutua evita declararla como dolencia profesional con derecho a pensión».
«Una de las denuncias que tenemos en el juzgado -dijo- es la de un obrero de cantera con insuficiencia pulmonar, desviado por la mutua de su empresa a la sanidad pública como si fuese enfermedad común, y ahora tratamos de detectar sílice en sus pulmones para demostrar que tiene silicosis y facilitar su acceso a una pensión por invalidez, porque no tiene cura».
Según Gómez, los accidentes laborales hacen que cada día tres obreros no vuelvan a su casa en España y, en el caso de Galicia, durante 2007 hubo 51.852 accidentes, 3.284 más que en 2006, y de ellos 96 mortales.
Jorge Vaz, técnico en Salud Laboral de CCOO, explicó que la mayor parte de los accidentes son evitables, ya que resultan de fallos o inexistencia de medidas de seguridad o preventivas, «porque hay empresarios que no entienden que gastar en seguridad es mucho más rentable», indicó.
Por su parte, el secretario comarcal de UGT en Ourense, José Luis Fernández Celis, señaló que, aparte de la manipulación de las mutuas, los datos oficiales no son reales «porque excluyen a los empleados que sufren accidentes en el camino entre su puesto de trabajo y su casa».
Destacó que los accidentes en las obras del AVE impulsaron la creación en Ourense de un grupo de trabajo único en Galicia, con sindicalistas, Fiscalía e Inspección de Trabajo, que acordó reunirse de forma periódica para analizar los accidentes laborales en cualquier empresa, «porque la tendencia cambia, pero el número de accidentes es muy alto en comparación al resto de Europa», agregó.
La prevención contra la siniestralidad
La prevención, según Fernández, debería ser el punto fuerte en la lucha contra la siniestralidad, «pero hay dos patas muy débiles que son el escaso número de inspectores -seis para 12.300 empresas en toda la provincia- y los empresarios sin escrúpulos», opinó.
Según Fernández Celis, la sobrecarga de trabajo origina muchos accidentes, «porque constructores envían al tajo a obreros en días de temperaturas elevadísimas o jornadas que duran mucho más allá de lo legal», en trabajos como el transporte urgente, sector que registró once de las 96 muertes por accidente laboral en Galicia en 2007.
Los datos, según el secretario de UGT «son tozudos», y, en un intento de reducirlos, el sindicato pondrá en marcha el día 14 de marzo una iniciativa pionera en Galicia con la instalación de un «aula móvil» que llevará a los principales centros de trabajo de la provincia información sobre prevención.
Todos los responsables sindicales consideraron que el principal problema de la nueva normativa de Seguridad y Salud Laboral y la Ley de Subcontratas aprobada en 2006 es la dificultad para aplicarlas.
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