Iberdrola impartió más de 810.500 horas de formación a sus empleados en 2007, un 22,7% más que en el ejercicio anterior, y aspira a alcanzar, como parte de su plan estretégico hasta 2010, cerca de tres millones de horas de aprendizaje, según anunció ayer en un comunicado.
La compañía presidida por Ignacio Sánchez Galán asegura que su firme compromiso con el aprendizaje de calidad de sus trabajadores le ha permitido ampliar sus programas de formación al 84% de la plantilla.
Durante el ejercicio, la eléctrica organizó un total de 11.041 cursos, a los que acudieron 22.000 empleados. Cada uno de ellos dedicó una media de casi 37 horas a mejorar su formación durante el año.
Por áreas, el 44% de las horas de aprendizaje se centró en la formación técnica, mientras que a la seguridad y salud laboral se dedicó el 18,5%. La formación en idiomas equivalió al 10% del total.
A lo largo del periodo 2008-2010, Iberdrola prevé impartir alrededor de tres millones de horas de formación, en línea con los objetivos para el área de Recursos Humanos fijados en el Plan Estratégico, y para ello contempla inversiones por 275 millones de euros en el próximo trienio.
La compañía prevé potenciar los centros de formación que ya posee en Escocia e Inglaterra, así como el que está construyendo en la localidad madrileña de San Agustín de Guadalix. Este último, conocido como Campus de Iberdrola, tendrá una extensión superior a los 150.000 metros cuadrados, de los que 35.000 metros cuadrados se destinarán a áreas docentes.
Los objetivos prioritarios de la formación en la eléctrica son desarrollar las competencias de sus profesionales para mejorar de forma cualitativa y cuantitativa su contribución a la organización y facilitar, al mismo tiempo, la progresión personal de su equipo humano.
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