Los espacios de trabajo flexible se han convertido en una tendencia creciente en el ecosistema laboral de nuestro país durante los últimos años. La pandemia provocada por el coronavirus supuso un frenazo en la inversión de las empresas en este tipo de soluciones debido al auge del teletrabajo, pero, desde que España superó esta contingencia, los datos de crecimiento de este sector no han dejado de aumentar.
Tal y como refleja un estudio llevado a cabo por la consultora inmobiliaria CBRE, que recientemente ha asesorado a Lexington (compañía pionera en espacios de trabajo flexible en España) en su última apertura en L’illa Diagonal, el stock flex es cada vez mayor y en 2022 se ha visto incrementado en un 12%.
En 2022, se sumaron casi 50 mil metros cuadrados de espacios flexibles a las cifras de 2021. Madrid ha experimentado un crecimiento del 83% con un total de 18.000 metros cuadrados más que el año anterior, mientras que en Barcelona ha continuado demostrando su atractivo para los operadores que ofrecen este tipo de servicios con un aumento de casi 30.000 metros cuadrados.
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