para entender cómo evitar la discriminación laboral hay que comenzar por desarrollar una política empresarial de igualdad y no discriminación en las organizaciones, así como comunicarla tanto a nivel interno como externo. Claro que para ello es clave establecer previamente los valores y pilares de la cultura organizacional congruentes con este objetivo.
También es de gran relevancia que las tareas de reclutamiento y de selección de personal dentro de las empresas comiencen siendo inclusivas.
El liderazgo inclusivo también es un factor prioritario en este proceso. Cuando las personas que lideran la organización asumen la responsabilidad de garantizar la igualdad y demuestran un compromiso con la no discriminación, envían una señal clara al resto del equipo.
Los comentarios están cerrados.