La crisis económica de la pasada década fue pésima, malísima, terrible. Pero dotó a los españoles de un deseo clave en el mercado laboral: el afán emprendedor. Muchos fueron los trabajadores que, tras quedarse en paro, apostaron por crear su propia empresa y, ahora, les va genial. De cara a 2020, las estadísticas dicen que más de un tercio de los españoles en edad laboral pretenden crear su propia empresa.
¡Gran dato!
Los comentarios están cerrados.