Buena noticia por un lado, mala por otra. Resulta que el 25% de los estudiantes de bachillerato afirma que tiene pensado montar su propio negocio, mientras que en los universitarios esta cifra baja hasta el 20%. Buena por la ambición de los más jóvenes; mala porque el porcentaje debe aumentar en esta realidad tan cambiante.
¡Celebrar y seguir trabajando!
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