Aprovechar que una mujer está embarazada para intentar librarse de ella como empleada es algo que, aunque nos cueste reconocerlo, aún se sigue produciendo en muchas empresas españolas en las que el anuncio de una futura natalidad puede convertirse en una auténtica persecución para la trabajadora anunciante.
Una mujer embarazada aporta buenos valores a la empresa, entre ellos, el de seguridad, estabilidad, fidelidad y apertura a mundos familiares y emocionales. Una mujer que se siente protegida cuando está embarazada es fiel a la empresa.
Veamos este positivo y realista punto de vista y acusemos a aquellos que no lo entienden así.
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