Si algo tiene la crisis de positivo es que, al haber menos gente trabajando, se producen menos muertes en el tajo.
Así, según datos del ministerio de Trabajo, hasta febrero de este año falleció en accidente laboral un 31% menos de trabajadores que en 2008.
De todas formas, para conocer si el dato es realmente positivo –dando por hecho que el que muera menos gente siempre es positivo-, debe analizarse la disminución en términos relativos, según la población activa de entonces en los sectores de actividad más afectados.
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