La incapacidad de ahorrar, la obligación de recortar gastos, el temor de llegar al final de la quincena o de mes sin dinero y problemas de sobreendeudamiento, son algunos síntomas del llamado estrés financiero.
El estrés financiero impide a las personas concentrarse y cumplir oportunamente con su trabajo, incluso, pueden llegar a enfrentar problemas de salud y hasta conflictos familiares, debido a que la atención está enfocada en el problema económico, destacó la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).
Señala que lo anterior desencadena varios problemas que involucran a las empresas, como atrasos en el trabajo, ausentismo laboral y la sustitución de personal.
«El estrés financiero es el término que se da cuando hay problemas económicos que generan ansiedad y tensión nerviosa permanente en los trabajadores, lo que puede afectar la productividad y estabilidad laboral».
Resalta que de acuerdo con un estudio de Sodexo, 76% de los empleados en América Latina son afectados por la inseguridad financiera, lo que genera un impacto negativo y es una de las mayores causas de estrés a nivel mundial.
Según la investigación, dicha situación afecta considerablemente el rendimiento profesional de una persona al dedicar tiempo del trabajo a tratar de mejorar su situación económica, además de ausentarse constantemente.
De ahí la importancia de fomentar y crear una educación financiera dentro de las empresas, para que los colaboradores aprendan a manejar de manera eficiente su dinero, conozcan los riesgos del sobreendeudamiento, utilicen a su favor los productos financieros y planeen su retiro laboral.
En ese sentido, la Condusef desarrolló su programa «Educación financiera en tu institución (EFI)», con el cual busca difundir contenidos prácticos en materia de finanzas personales y así adquieran conocimientos que les permitan tomar decisiones informadas en el manejo de su dinero.
En la publicación mensual Proteja su Dinero, la Comisión refiere que el EFI es una estrategia 100 por ciento educativa y no representa ningún costo para las empresas o instituciones participantes.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF) 2018, 91.7% de la población adulta en México no ha tomado un curso sobre cómo ahorrar, cómo hacer un presupuesto o sobre el uso responsable del crédito.
Los comentarios están cerrados.