Un territorio inexplorado para muchas empresas es la educación. Un campo con ventajas económicas, emocionales y sociales para las empresas que colaboran con sus empleados en su función educadora en el hogar.
Las empresas quieren conectar con sus empleados y con sus clientes en los territorios que más les ocupan y preocupan. Las empresas quieren conseguir el compromiso de sus empleados y clientes conectando a través de las emociones.
¿Es la educación de los hijos un territorio inexplorado para la mayoría de las empresas?
Es una obviedad: no hay nada más importante para una persona que sus hijos. A cada uno de nosotros nos gustaría hacer nuestra función de madre o padre lo mejor posible, a pesar de que – en la mayoría de los casos – nadie nos ha formado para ello.
¿Puede la empresa ayudar a sus empleados para ser mejores educadores? ¿Debería formar parte de los objetivos de las empresas conseguir que sus empleados sean además de buenos profesionales, buenos educadores?
Colaborar con los empleados madres y padres para que sean mejores educadores es fuente de beneficios para todo el mundo.
Para el individuo y su familia: Cualquier persona es capaz de demostrar con acierto un conocimiento biológico primario: sabemos cómo se hacen hijos. En cambio, es más difícil constatar que una vez nacidos sepamos cómo educarlos. Los hijos llegan y muchos nos dedicamos a repetir lo que nuestros padres hicieron con nosotros o a actuar de forma instintiva. A menudo perdemos conciencia de nuestra labor educativa y vemos pasar los años sin mejorar en la ilusionante tarea de educar. Cuando uno sabe más, educa mejor. Cuando una persona educa mejor, disfruta de su labor educativa. Saber educar proporciona estabilidad emocional, orgullo, disfrute para quien educa y para quien es educado.
Para la sociedad: Lo señaló Nelson Mandela: “La educación es el arma más poderosa para cambiar el mundo”. El hecho educativo más cotidiano – hay más de trece millones y medio de personas educando en el hogar cada día en España, más de 120 millones si sumamos los países latinoamericanos hispanohablantes – y más potente – quién no recuerda con claridad herencias, mensajes de nuestras madres y padres – se celebra cada día en el hogar.
Si contribuimos, a través del conocimiento y la ilusión, a mejorar ese acto educativo, mejoramos la educación. Mejoramos nuestro presente y contribuimos a mejorar nuestro futuro.
Para la empresa: La empresa que contribuya a que las madres y padres de su plantilla sean buenos educadores encontrará beneficios desde la perspectiva de los recursos humanos, de la reputación y el marketing.
Recursos humanos: Si no es suficiente con el sentido común, hay datos que corroboran que los mejores madres y padres son mejores profesionales. Es lógico: hay habilidades del mundo familiar que se trasladan al mundo empresarial. La estabilidad emocional que nos proporciona saber educar mejor ayuda a pasar de un círculo vicioso a uno virtuoso en la conexión entre el trabajo y la familia. Que una empresa se ocupe de colaborar en formar a sus empleados como madre o padre es fuente de compromiso y conexión emocional.
Reputación: Conectar la empresa con la educación (uno de los temas que más preocupan a los ciudadanos) a través de los empleados es un acto de responsabilidad con los empleados y con la sociedad.
Marketing: Muchos de los clientes y usuarios de cualquier empresa son madres y padres. Conectar la marca con la educación es conectar la marca con las emociones de una gran parte de la sociedad.
La empresa Gestionando hijos ha nacido con el objetivo de colaborar con madres y padres para que sean mejores educadores y se ha propuesto hacerlo a través de las empresas. Lo hace de la mano de los mayores especialistas del país en este campo: Javier Urra, Catherine l’ecuyer, Fernando Botella, Begoña Ibarrola, Carlos González , Eva Bach, son algunos de los muchos profesionales que colaboran en ese objetivo. Más de 700 personas se dieron cita en su primer evento en Madrid y ya son varias empresas las que están contratando sus servicios para colaborar con sus empleados para que sepan más para educar mejor (que es su leyenda).
Su próxima gran cita será en Barcelona, donde esperan contar con muchas empresas y personas. Empresas que quieran sumarse a esta nueva forma de entender la relación con los empleados y empleados que saldrán renovados, ilusionados y entusiasmados con su rol en la educación de sus hijos. Y que agradecerán y apreciarán más a su empresa por haberles ofrecido esta oportunidad. La información del evento está en www.gestionandohijos.com/evento.
El lector de RRHHDigital.com sabe que el verdadero compromiso de las personas se consigue a través de acciones que muestren autenticidad, sinceridad y emoción. Colaborar con ideas, contenidos y formación para que los empleados que son madres y padres sean buenos educadores es bueno. Para todos.
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